viernes, 23 de marzo de 2018

La caida de Ghouta .-Y la historia de los “Novichok” .




Otro cuento como las armas de destrucción masiva iraquíes
La historia de los “Novichok”


Traducido del inglés para Rebelión por S. Seguí

Recientemente, en 2016, el Dr. Robin Black, Jefe del Laboratorio de Detección de la única instalación de armas químicas existente en el Reino Unido, situada en Porton Down, y excolega del Dr. David Kelly, publicó en una prestigiosa revista científica que los indicios de la existencia de “Novichoks” eran escasos y la composición de éstos desconocida.
“En los últimos años, se ha especulado abiertamente sobre una cuarta generación de agentes nerviosos, “Novichoks” (Recién llegados), desarrollados en Rusia a partir de la década de 1970 como parte del programa “Foliant”, con objeto de encontrar agentes que pudieran comprometer las contramedidas defensivas. La información sobre estos compuestos disponible públicamente es escasa, y en su mayoría procede de un químico militar disidente ruso, Vil Mirzayanov. No se ha publicado ninguna confirmación independiente de las estructuras o las propiedades de dichos compuestos.” (Robin Black, Development, Historical Use and Properties of Chemical Warfare Agents, Royal Society of Chemistry, 2016).

Sin embargo, ahora, el Gobierno británico afirma ser capaz de identificar instantáneamente una sustancia de la cual su propio único centro de investigación de armas biológicas nunca antes ha tenido noticia y ni siquiera tiene seguridad de su existencia. Peor aún, el Gobierno afirma ser capaz no solo de identificarla, sino de identificar su origen. Si tenemos en cuenta la publicación del Dr. Black, es evidente que esta afirmación no puede ser cierta.
Los expertos internacionales en armas químicas del mundo comparten la opinión del Dr. Black. La Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPCW, por sus siglas en inglés) es un organismo de la ONU con sede en La Haya. En 2013, afirmaba lo siguiente en un informe de su Consejo Asesor Científico (SAB, por sus siglas en inglés), del que formaban parte representantes del gobierno de EE. UU., Francia, Alemania y Rusia, así como el Dr. Robin Black como representante del Reino Unido:
[El SAB] hace hincapié en que la definición de sustancias químicas tóxicas que figura en la Convención debería abarcar todos los posibles productos químicos que pudieran utilizarse como armas químicas. En lo que respecta a los nuevos productos químicos tóxicos que no figuran en el Anexo sobre productos químicos pero que, sin embargo, pueden suponer un riesgo para la Convención, el SAB hace referencia a “Novichoks”. Este nombre, “Novichok”, figura en una publicación de un científico de la era soviética que informó haber investigado una nueva clase de agentes nerviosos adecuados para un uso como armas químicas binarias. El SAB declara que no tiene información suficiente para comentar sobre la existencia o las propiedades de los “Novichoks”. (OPCW, 2013)
OPCW: Informe del Consejo Asesor Científico (SAP) sobre avances científicos y tecnológicos para la Tercera Conferencia de Examen, de 27 de marzo de 2013
De hecho, la OPCW era tan escéptica con respecto a la viabilidad de los “Novichoks” que decidió, con el acuerdo de los EE. UU. y el Reino Unido, no agregarlos, ni tampoco sus supuestos precursores, a su lista prohibida. En resumen, la comunidad científica acepta en general que Mirzayanov estaba trabajando en “Novichoks”, pero duda de que lograra algún éxito.
Dado que la OPCW ha aceptado que la prueba de la existencia de “Novichoks” es dudosa, si el Reino Unido tiene una muestra de uno de dichos compuestos es extremadamente importante que la presente a la OPCW. De hecho, el Reino Unido tiene una obligación contractual vinculante de presentar esa muestra a dicha Organización. Rusia ha presentado una demanda oficial a la OPCW –de la que no han informado los medios de información corporativos– para que el gobierno británico presente una muestra del material de Salisbury para su análisis internacional.
Sin embargo, Gran Bretaña se niega a presentar dicha muestra a la OPCW.
¿Por qué?
Una segunda parte de la acusación de la Primera Ministra May es que los “Novichoks” solo podrían fabricarse en determinadas instalaciones militares. Pero se trata también de una afirmación falsa, como puede demostrarse. Si es que en realidad existen, los “Novichoks” fueron supuestamente diseñados para poder fabricarlos en las instalaciones de cualquier fábrica de productos químicos para uso comercial, lo cual era un aspecto importante del asunto. La única evidencia real de la existencia de “Novichoks” era el testimonio del ex científico soviético Mizayanov. Y he aquí lo que Mirzayanov realmente escribió:
“Debe tenerse en cuenta que los componentes químicos o los precursores del A-232, o su versión binaria “Novichok-5”, son organofosforados ordinarios que se pueden fabricar en empresas químicas comerciales que fabriquen productos como fertilizantes y pesticidas.”
Vil S. Mirzayanov, “Dismantling the Soviet/Russian Chemical Weapons Complex: An Insider’s View,” in Amy E. Smithson, Dr. Vil S. Mirzayanov, Gen Roland Lajoie, and Michael Krepon, Chemical Weapons Disarmament in Russia: Problems and Prospects, Stimson Report No. 17, Octubre 1995, p. 21.
Constituye pues una imposibilidad científica que Porton Down pueda haber probado los “Novichoks” rusos si nunca han tenido en sus manos una muestra rusa para compararlos. Sus científicos pueden analizar una muestra conforme a una fórmula de Mirzayanov, en una publicación de acceso general hace veinte años, lo cual no prueba su origen ruso. Si Porton Down puede sintetizarlos, también pueden hacer muchos otros, no solo los rusos.
Y por último, Mirzayanov es un nombre uzbeko y el programa “Novichok”, suponiendo que existiera, se creó en la Unión Soviética, pero muy lejos de la Rusia moderna, en Nukus, en el actual Uzbekistán. Visité personalmente las instalaciones de armas químicas de Nukus. Estas fueron desmanteladas y puestas en lugar seguro, todas las existencias fueron destruidas y el equipo retirado por el gobierno estadounidense, como recuerdo haber finalizado durante mi estancia como Embajador en ese país. De hecho, nunca ha habido pruebas de la existencia de “Novichoks” en Rusia misma.
En resumen:
1) Porton Down ha reconocido en publicaciones que nunca ha tenido en sus manos “Novichoks” rusos. El gobierno británico no tiene en absoluto información de “huellas” que puedan atribuir esta substancia a Rusia.
2) Hasta ahora, ni Porton Down ni los expertos de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPCW) están convencidos de la existencia misma de los “Novichoks”.
3) El Reino Unido se niega a proporcionar muestras a la OPCW.
4) Los “Novichoks” fueron diseñados específicamente para poder fabricarlos a partir de componentes de uso corriente en cualquier instalación científica. Los estadounidenses desmantelaron y estudiaron las instalaciones que supuestamente los desarrollaron. Es completamente falso que solo los rusos podrían fabricarlos, si es que alguien puede hacerlo.
5) El programa “Novichok” estaba en Uzbekistán no en Rusia. Su legado fue heredado por los estadounidenses durante su alianza con el presidente uzbeko, Islom Karimov, no por los rusos.

Con mi agradecimiento a las fuentes de información que no puedo citar en este momento.


Craig Murray es diplomático británico, embajador de su país en Uzbekistán hasta 2004.
Fuente: https://www.craigmurray.org.uk/archives/2018/03/the-novichok-story-is-indeed-another-iraqi-wmd-scam/



 y ver  ...



  y, ver

  



NOTA  .- Pero acabo ahi la cosa , May se vino a la renion del Brexit y espolvoreo la mierda que llevaba encima y no le  hicieron ni caso ..tocaba hablar  de setas y no de rolex,  y ademas el  partido consrevador recibio   mas de  3, 4 mil millones de financiacion de los oligarcas rusos ttps://www.eldiario.es/theguardian/conservador-britanico-Rusia-Arabia-Saudi_0_749625477.html

  




miércoles, 21 de marzo de 2018

El Leviatán y las fake news.


¿Noticias falsas? "La amenaza es el Estado"

  Marie Lemonnier
Entrevista con Emmanuel Todd. No contento con disponer del monopolio de la violencia "legítima", el Estado querría garantizarse el monopolio de las "fake news"

El mayor productor de “fake news” [“noticias falsas”] no es quien se cree, responde al semanario francés L´Obs el historiador Emmanuel Todd, que se inquieta por las tendencias autoritarias en la cima del poder.
El gobierno francés ha anunciado una ley de fiabilidad y de confianza de la información para luchar contra las “fake news”. ¿Qué piensa usted de ello?
Me siento muy inquieto. Lo que me sorprende en el periodo actual, cuando se supone que vivimos la apoteosis de la democracia liberal tras el hundimiento de los totalitarismos, es el encogimiento de los espacios de expresión y de la libertad de pensamiento.
La libertad, desde la Edad Media, se ha definido en primer lugar contra la Iglesia y, luego, contra el Estado. Decir que el Estado va a garantizar la libertad de expresión ¡es un oxímoron histórico! Y me siento particularmente inquieto en el caso de Francia, en tanto que historiador, puesta que se muestra ambivalente en su relación con la libertad: es al mismo tiempo una de las naciones que han construido la democracia liberal, con Inglaterra y los EEUU, y el país del absolutismo de Luis XIV, de Napoleón I y Napoleón III, de Pétain y de la ORTF [Oficina de Radiodifusión-Televisión Francesa, el organismo radiotelevisivo público de Francia entre 1964 y 1974].
Ahora bien, estamos viviendo una desintegración de los partidos y de la representación política. Los grupos culturales e ideológicos antagonistas que garantizaban un pluralismo estructural de la información (el PC, la Iglesia, el socialismo moderado, el gaullismo…) han hecho implosión. El pluralismo no está, por tanto, garantizado y los medios representan cada vez más una masa indistinta. Se trata típicamente de una clase de situación en la que puede aparecer el Estado como máquina autónoma y colocarse por encima de la sociedad para controlarla. La amenaza que veo dibujarse no es la de las “fake news” sino la del autoritarismo de Estado y su autonomización en tanto que agente de control de la opinión. Será tanto más autoritario en el plano de la información en la medida en que se revele impotente en el plano económico: la sociedad está bloqueada, con una tasa de paro que oscila en torno al 10%, y cada vez más fragmentada en grupos que se cierran sobre si mismos (los corsos, los habitantes de Neuillly, lo mismo que los musulmanes).
Las GAFAM [acrónimo que engloba a las cinco grandes de la Red: Google, Apple, Facebook, Amazon y Microsoft ], que son ahora vehículos primordiales de información, ¿no representan también un peligro?
Que las GAFAM no paguen los impuestos que deberían, que tengan estrategias monopolistas, sí, desde luego. Pero no creo que estos medios de intercambio entre individuos, por otro lado extraordinarios en lo que respecta a hacer circular la información, sean los poderes ocultos que se nos describe. Lo que digo, por el contrario, es que hay países en los que está controlado el acceso a Internet [como EEUU].
Llamar la atención sobre las GAFAM es desviar la atención del actor mayor y productor principal de “fake news” en la Historia, que es el Estado. Como estamos en una economía de mercado, los franceses sobreestiman el liberalismo intrínseco de su sociedad y subestiman el poder de desinformación del Estado. La guerra de Irak comenzó, mira por dónde, por las “fake news” que provenían del Estado norteamericano sobre las armas de destrucción masiva en Irak, con Colin Powell agitando su frasquito ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
El Estado es que tiene el poder financiero, la ventaja de la continuidad, el monopolio de la violencia legítima: si es cierto que hay un productor de “fake news” es el Estado. Y el Estado del propio país, no los estados exteriores. El principio fundador de la democracia liberal es, en efecto, que si la colectividad ha de garantizar la seguridad del ciudadano, el ciudadano debe estar protegido frente a su propio Estado.
Por ende, las noticias falsas, los delirios y los rumores mentirosos son el nunca acabar de la vida democrática. Y la idea misma de la democracia liberal consiste en apostar por que los hombres no son niños para siempre. Controlar la información es infantilizar al ciudadano.
¿Qué indica una ley sobre “fake news”?
En el fondo, este debate nos hace pensar en clases dirigentes con una gran desesperación intelectual. Como ya no comprenden la realidad que han creado, el comportamiento de los electorados, Trumpo, el Brexit… quieren prohibir. No contento con disponer del monopolio de la violencia "legítima", el Estado querría garantizarse el monopolio de las "fake news".
L'Obs. Traducción: Lucas Antón para Sinpermiso.

 Verdaderas fake news .. EL CASO DE España
  https://www.infolibre.es/noticias/opinion/columnas/2018/03/16/verdaderas_fake_news_80723_1023.html


martes, 20 de marzo de 2018

Vargas Llosa la barbarie del imperio global neoliberal .





La tribu de Vargas Llosa y los pensionistas

JESÚS CUADRADO  

    «Miles de pensionistas en la calle se han convertido en los gansos del capitolio romano, los que avisaron a la ciudad, dicen, del asalto de los bárbaros»
    «Vargas Llosa en La llamada de la tribu explica su evolución ideológica desde un fundamentalismo, el comunismo, a otro, el de los mercados que se autoregulan»
    «Lo que sostiene Hayek, y Vargas Llosa le sigue ciegamente, es que la libertad que importa es la del mercado, la libertad de hacer dinero, y esa libertad condiciona todas las demás»
El sistema público de pensiones se ha situado en el centro del debate político en España. Miles de pensionistas en la calle se han convertido en los gansos del capitolio romano, los que avisaron a la ciudad, dicen, del asalto de los bárbaros. Aquí, lo que está en peligro es el Estado de Bienestar. Enemigos no le faltan, empezando por los extremistas del mercado libre, no regulado, los herederos del radical Friedrich Hayek, la fuente en la que bebieron Margaret Thatcher y Ronald Reagan. Cuidado, intentan su rehabilitación, y ya se sabe, como decía Keynes, “la vida de las personas suele estar determinada por la teoría de algún fallecido economista”.

El Nobel Mario Vargas Llosa ha publicado un libro, La llamada de la tribu, en el que explica su evolución ideológica, su aventura política desde un fundamentalismo, el comunismo, a otro fundamentalismo, el de los mercados que se autoregulan y el Estado mínimo. De Carlos Marx a Friedrich Hayek. De una tribu a otra tribu, aunque él le pone un nombre fino a la iglesia en la que ahora milita: Liberalismo. Tiemblen, pues, los que dependan de una pensión pública.

«Si el Estado interviene en la economía para organizar un sistema público de pensiones, por ejemplo, el resultado inevitable, decía Hayek, será la dictadura»

¿Quién es Hayek? La respuesta corta: representa lo contrario de Keynes. El duelo entre ambos es bien conocido, pero lo que mejor resume la doctrina de Hayek es su profecía. Si el Estado interviene en la economía, para organizar un sistema público de pensiones, por ejemplo, el resultado inevitable según el economista austriaco será la dictadura. Aunque el gran novelista peruano despliegue todo su arte para que, al decir intervención del Estado, pensemos en la planificación estalinista, no cuela, don Mario. El señor Hayek lo dejó bien claro. Se refería a los que el Nobel denomina, en su libro de contenido político, “populistas laboristas británicos de posguerra”, a Suecia y las socialdemocracias nórdicas, a todas las políticas keynesianas. Hoy, si se hubieran cumplido las previsiones ‘científicas’ de Hayek, el falso profeta, Suecia sería una horrible dictadura. Ese es el gran Hayek, homenajeado por los camaradas de don Mario y por él en La llamada de la tribu. Ya pueden intentar arreglarle el desaguisado al Nobel, pero Hayek es Hayek, y no tiene enmienda. Se empieza con pensiones públicas y se termina en la dictadura; esa es su tesis, y la de sus seguidores.

En este libro, se muestra el Vargas Llosa más extremista, el que unió sus armas ideológicas al Aznar de FAES, quien mejor tradujo el pensamiento hayequiano en España cuando, harto de vino de Ribera en una bodega de Fuensaldaña, en Valladolid, dijo aquello de “¿quién es el Estado para conducir por mí?”. En esas doctrinas bebe el autor de La llamada de la tribu. Y lo hace con el buen oficio literario que se espera de él. Los derechistas españoles se lo agradecen, como hace unos días Cayetana Álvarez de Toledo. Eres “uno de los nuestros”, le susurran.

«Friedrich Hayek prefería un Pinochet “liberal” a una democracia, en su jerga, “intervenida”. Ni el gran Nobel de Literatura arregla eso, aunque lo intenta»

Para entendernos: Hayek prefería un Pinochet “liberal” a una democracia, en su jerga, “intervenida”. Ni el gran Nobel de Literatura arregla eso, aunque lo intenta. Lo que escribe Vargas Llosa es que las tesis de Hayek sobre cómo la planificación socialdemócrata llevan a la “instalación de una dictadura” son de “una acerada lucidez”. ¿Lo de Pinochet? Otro día, otro libro. No son errores, son la tesis central del sujeto. Lo que sostiene Hayek, y Vargas Llosa le sigue ciegamente, es que la libertad que importa es la del mercado, la libertad de hacer dinero, y esa libertad determina todas las demás. Por eso son unos peligrosos doctrinarios. No es una cuestión de eficiencia económica, es por ideología.

Son las ideas que ahora llevan a Vargas Llosa a escribir este libro, pero con trampas para disimular el producto. Ensalza las ideas de Hayek sobre lo malos que son los Estados intervencionistas, pero al citar a Suecia esconde que ésta dedica más de la mitad del PIB a gasto público, a pensiones, sanidad pública y esas cosas. Argumenta con Hayek que mucho Estado lleva a la corrupción, pero trampea con un Estado tan poco corrupto como Dinamarca que tiene más Estado que nadie. Hace como si no supiera que su ídolo se refiere a los Estados socialdemócratas y juega a confundir con las dictaduras comunistas. No, don Mario, usted es muy hábil con el idioma, pero el conflicto no era entre Marx y Hayek, sino entre éste y Keynes. En este caso, la trampa consiste en elegir a un contrincante débil, un profeta tan fracasado como el suyo.

Y la trampa más tramposa. Mezcla en el libro a Hayek con varios intelectuales que criticaron la dictadura comunista como si todos estuvieran en la misma causa. Ya el gran historiador Tony Judt advirtió sobre esta trampa: “Arthur Koestler, Raymon Aron, Albert Camus o Isaiah Berlin, trataron de subrayar las diferencias entre las reformas socialdemócratas destinadas al bien común y las dictaduras de partido”. Estos pensadores denunciaron la dictadura soviética y sus crímenes, pero nada tienen que ver con las ideas antikeynesianas y antisocialdemócratas de Hayek. Vargas Llosa es muy libre de apuntarse a la tribu de los radicales del mercado, pero hágalo por derecho, señor Nobel, sin trampas.

«Si se despoja al Nobel de sus cualidades literarias, ¿qué queda? Queda un laureado escritor al servicio de la doctrina social más dura e inmoral»

Nada es ingenuo. Cuando hoy desde la derecha española se atacan las opciones socialdemócratas del Estado de Bienestar, sean pensiones públicas u otras, por no sostenibles y negativas para el crecimiento, Vargas Llosa exhibe la misma doctrina de Hayek y su Camino de servidumbre sobre la que Thatcher decía “esto es en lo que creemos”. Suma su habilidad de publicista de calidad a la causa, pero es por pura ideología. En este libro, si se despoja al Nobel de sus cualidades literarias, ¿qué queda? Queda un simple fundamentalista del mercado, como tantos. Un laureado escritor al servicio de la doctrina social más dura e inmoral. Artillería para atacar sistemas públicos como el de las pensiones, en peligro.

Tiene una gran ventaja: publica su libro doctrinario en un país en el que la socialdemocracia no tiene quien le escriba. Como señala su biógrafo Robert Skidelsky, Keynes venció a Hayek en dos momentos clave, en la Gran Depresión de los años treinta y en la última Gran Recesión: 2-0. Pero lo importante hoy no es el keynesianismo victorioso del pasado, lo que se espera es un nuevo keynesianismo que renueve el consenso socialdemócrata. Por lo que he visto estos días en una de esas típicas conferencias políticas del PSOE, por ahí, poca esperanza. Si las respuestas no llegan, las viejas tribus volverán a ocupar el territorio. De momento, Vargas Llosa saca de paseo a la suya.



   Vargas una historia politica siniestra
   
http://www.rebelion.org/noticia.php?id=238909

http://www.sinpermiso.info/textos/contra-la-escritura-letrada-de-vargas-llosa


 Nota.-"Según Vargas Llosa ese “fondo torcido y retorcido” que hace que los varones produzcan literatura en la que la humillación y violencia sobre las mujeres es convertida en obra de arte, es inherente y característico de lo humano.  De lo humano masculino, obviamente;  y por lo mismo deberíamos asumir que soportarlo, aceptarlo, y quizá hasta gozarlo, debiera ser inherente a lo humano femenino, ya que según él, comprender ese “fondo torcido” nos permite “comprender la vida de manera más profunda y vivirla en su plenitud”.  Vargas Llosa, como otros tantos genios machunos, cree firmemente que la superioridad jerárquica de los varones es un rasgo natural de la especie. La violencia, la rabia y el deseo de dominación serían esos “fondos malditos que llevamos dentro” que necesitarían imperiosamente salir a la luz de una o u otra manera y,  ¡que mejor manera que la cultura!  No queda claro si las mujeres también tenemos esos “fondos malditos” dentro  (Vargas Llosa, como todos los machunos no ha salido del paradigma de lo universal masculino, y escribe solo para ellos),"    VER EN ...   http://blogs.publico.es/dominiopublico/25374/la-amenaza-feminista-segun-vargas-llosa/