lunes, 4 de mayo de 2015

. El despertar de Asia .Desde las ruinas de los imperios.




Desde como USA  arrojo las bombas atómicas en Japón como venganza para aplastarlos , cosa que no había visto nunca escrito así , a como un Ho-Chi-Min indigente en París intentando con otros asiáticos lograr que se les aplicara el principio de autodeterminación de los puntos de Wilson en Versalles y no les hicieron ni caso o al representante chino que no llego pues venía andando a lo largo del Transiberiano ruso , a todo una serie de intelectuales árabes chinos, iraníes...egipcios  y más, nos describe desde un Oriente hundido y colonizado como en siglo y medio realizo su larga modernización , desde Japón a Turquía , pasando por Egipto , India ,China , Indonesia y todos los grandes estados de la zona en la actualidad y como la influencia de varios intelectuales algunos bien desconocidos lo fueron planteando…y como los movimientos panislámicos actuales explican perfectamente desde ese pasado tanto en su rechazo a Occidente como en su imitación..Y así luego de leer la reseña de Tagore en la wiki , y ver la torpeza con que está escrita y ver quien en realidad fue por este libro ,uno se queda como el que lo engañaron con la sopa boba .





Desde las ruinas del imperio, entrevista con Pankaj Mishra
"El evento central del pasado siglo para la mayoría del mundo fue el despertar político de Asia"

Al Jazeera



En el prólogo de su nuevo libro From the Ruins of Empire: The Revolt Against the West and the Remaking of Asia [Desde las ruinas del imperio: La revuelta contra Occidente y la transformación de Asia], el galardonado autor y ensayista Pankaj Mishra escribe:


“Occidente ha visto Asia a través de la estrecha perspectiva de sus propios intereses estratégicos y económicos, dejando sin examinar –y sin imaginar– las experiencias colectivas y subjetividades de los pueblos asiáticos… [Este libro] no trata de reemplazar una perspectiva eurocéntrica o centrada en Occidente por otra igualmente problemática centrada en Asia. Más bien, se propone abrir múltiples perspectivas respecto al pasado y el presente, convencido de que las suposiciones de poder occidental –cada vez menos sostenibles– ya no constituyen un punto de observación fiable e incluso pueden ser peligrosamente desorientadoras.”


Concentrándose en las trayectorias de dos pensadores y activistas itinerantes, el persa Jamal al-Din al-Afghani (1838-97) y el chino Liang Qichao (1873-1929) –así como en otros intelectuales y dirigentes asiáticos– Mishra cuestiona airosamente la narrativa centrada en Occidente, postulando que “el evento central del siglo pasado para la mayoría de la población del mundo fue el despertar intelectual y político de Asia y su emergencia de las ruinas de los imperios asiáticos y europeos”.


Esta tesis posibilita perspectivas cruciales y de otra manera inaccesibles de la historia contemporánea, incluyendo fenómenos que van de la formación de al Qaida al ascenso de China.


Tuve la oportunidad de dialogar con Mishra por correo electrónico sobre su libro, y la transcripción de la entrevista aparece a continuación.


En cuanto a la potencial fertilidad de las ruinas imperiales de nuestros días, las poblaciones acostumbradas a desviar la acusación de “incivilizados” hacia los no occidentales harían bien en reflexionar sobre obvios paralelos entre, por ejemplo, la actual conducta de los militares de EE.UU. en el exterior y la descripción de Mishra de los soldados franceses de la era de Napoleón, quienes “mientras reprimían la primera de las revueltas egipcias contra su ocupación, asaltaron la mezquita al-Azhar, ataron sus caballos a los nichos de oración, pisotearon los Quranes con sus botas, bebieron vino hasta la inconsciencia y luego orinaron en el piso”.


Belén Fernández: Usted explica al comienzo de From the Ruins of Empire:


“La forma de este libro –en parte ensayo histórico y en parte biografía intelectual– es motivada primordialmente por la convicción de que las líneas de la historia convergen en vidas individuales, incluso a pesar de que estas últimas tienen su propia forma y dinamismo. Los primeros hombres de Asia moderna que describe viajaron y escribieron prolíficamente, evaluando incansablemente sus propias sociedades y otras, meditando sobre la corrupción del poder, la decadencia de la comunidad, la pérdida de la legitimidad política y las tentaciones de Occidente. Sus apasionadas indagatorias aparecen en retrospectiva como un solo hilo, tejiendo eventos y regiones aparentemente dispares en una sola red de significado.”


Usted ha discutido su propia formación intelectual y viajes en anteriores escritos, como en su libro Temptations of the West: How to Be Modern in India, Pakistan, Tibet, and Beyond. ¿Qué convergencia de eventos y experiencias lo llevaron a comenzar From the Ruins of Empire?


Pankaj Mishra: Muchas cosas durante la última década. Solo hablaré de dos en esta oportunidad. La primera fue seguramente mi visita al valle de Cachemira de mayoría musulmana en el año 2000, donde presencié una ocupación militar por una nación Estado, India, que reivindicaba el prestigio moral del secularismo pero en realidad era en su mayoría hindú de muchas maneras significativas, así era percibida por los cachemiríes que habían pertenecido durante mucho tiempo a una cultura cosmopolita y sincrética.


Entonces me comencé a preguntar por qué muchas naciones Estado asiáticas habían resultado frecuentemente más violentas que los imperios europeos de Asia que habían reemplazado. Y entonces comencé a preguntarme –y es un tema importante en el libro– si los modelos políticos y económicos que los asiáticos habían adoptado de Occidente en su lucha por la autodeterminación y la dignidad eran desastrosamente inadecuados.


También me di cuenta de que la versión post-colonial de la historia con la que había crecido –que celebraba la emergencia de la nación Estado de la dominación extranjera– era profundamente defectuosa y omitía muchas cosas.


El otro factor que me influenció fue el clima político posterior al 11-S en Occidente. Cómo una variedad tan amplia de políticos, responsables políticos, periodistas y columnistas podían volver a abrazar las falsas ilusiones del imperio que se pensaba que habían sido efectivamente destruidas por la descolonización hace 50-60 años; cómo podían llegar a creer que los afganos y los iraquís solo ansiaban chupar los grandes garrotes que les ofrecían los soldados estadounidenses, como recomendó inimitablemente [el condecorado columnista de asuntos exteriores delNew York Times] Thomas Friedman…


Todo esto fue asombroso para mí, y para gente como yo que comparte una sospecha reflexiva respecto a los imperialistas armados que pretenden ser misioneros.


Por lo tanto ni las narrativas neo-imperialistas ni las post-coloniales parecían ser exactas. Ambas habían eliminado o descuidado toda una variedad de ideas y personalidades en el campo asiático, y sentí que era hora de volver a considerarlas, para ver lo que nos podían decir.

BF: El año pasado, usted hizo una reseña de Civilisation: The West and the Rest de Niall Ferguson para London Review of BooksEsto provocó un prolongado ataque de cólera de Ferguson, incluyendo acusaciones de difamación y la amenaza de una demanda judicial.


¿Cómo cuestiona la sustancia de su nuevo libro la visión del mundo de seudoeruditos como Ferguson, quien –como usted señala– se definió en 2003 como “un miembro totalmente remunerado de la banda neo-imperialista”, y apoyó la evaluación del neoconservador Max Boot de que EE.UU. debería esforzarse por replicar en Asia “el tipo de administración extranjera ilustrada que solía ser provista por ingleses seguros de sí mismos en pantalones de montar y salacots”?


PM: En este libro no apuntaba a los neo-imperialistas amantes de los pantalones de montar o a sus argumentos a favor de un imperio occidental renovado. No me interesa involucrarme en ideas tan absurdas y, como hemos visto en los últimos días, los fetichistas del salacot logran perfectamente desacreditarse a sí mismos.


Ciertamente no quería entrar en una discusión sobre si el imperialismo occidental tuvo su lado bueno, los pensadores y escritores asiáticos en mi libro comparten la simple suposición de que un sistema que santifica la violencia en gran escala, la explotación, la esclavitud y el racismo es reprensible, indeseable y, finalmente, insostenible.


Y lo más importante, el neo-imperialismo se ha desenmascarado como en bancarrota estratégica y moral. Retiene el potencial de hundir al mundo en una terrible conflagración  –un ataque a Irán podría ser la chispa– pero no puede preservar los intereses de EE.UU. en un mundo multipolar; solo puede dañarlos irreparablemente.


BF: Existe una tendencia, entre miembros del establishment de la política exterior y la intelectualidad occidentales, de reducir los fenómenos internacionales a una retórica y conceptos simplistas y no históricos – por ejemplo el 11-S = los musulmanes odian nuestra libertad.


¿Si adquirieran un interés espontáneo en el asunto, qué podrían aprender estos personajes de un estudio de al-Afghani, Liang Qichao y otros que pudiera posicionarlos para interpretar el terrorismo islámico contemporáneo, la Primavera Árabe, el ascenso de China?


“El embajador de EE.UU. en Afganistán podría presumiblemente ahorrarse por lo menos más donaciones de 25.000 dólares para la restauración de la tumba de al-Afghani que, como usted explica en el libro ocurrieron como resultado de una efímera convicción posterior al 11-S de que el hombre representaba un Islam moderado, liberal y compatible con Occidente. Usted objeta: “El voluble y brillante al-Afghani fue cualquier cosa que no sea ese insulso sueño de imaginación optimista”
La década del 11-S – ¿Choque de civilizaciones?


PM: Sí, se podría ahorrar mucho dinero, y gastarlo en programas meritorios en Occidente y en Afganistán, si las simples ecuaciones morales –minifaldas contra barbas talibanes– fueran reemplazadas por un encuentro con la historia de Occidente en Asia, y la no menos atormentada historia de Asia post-colonial.


Uno de los problemas con esos relatos y binarios seudoculturales y cuasi-psicológicos -esos bárbaros odian nuestras libertades etc., liberalismo contra islamofascismo– es que desconocen su propia larga historia.


Los asiáticos que sienten los filos cortantes de los “valores” occidentales como el liberalismo –y hay muchas personas semejantes en mi libro– conocían muy bien esos trucos ideológicos: extranjeros que justificaban su brutal dominación y humillación racial de los pueblos asiáticos en nombre de sus supuestamente superiores valores de “civilización”.


Es por cierto, solo una de las numerosas cosas que los responsables políticos occidentales podrían aprender si reflexionaran respecto a al-Afghani y Liang Qichao.


Sin embargo, la lección más importante y muy simple que contiene para los comentaristas estadounidenses y europeos, quienes durante mucho tiempo han asumido que todos en el mundo solo esperan convertirse en algo semejante a ellos, es la siguiente: cómo los asiáticos han concebido durante el último siglo y medio su sitio en el mundo dominado por una pequeña minoría de hombres blancos.


Es lo que mi libro trata de describir. En esa básica búsqueda de dignidad e igualdad y de liberación de la humillación –tan obvia pero tan pocas veces discutida– se basan todos los eventos de los que usted habla, sean la Primavera Árabe o el ascenso de China.


Por lo tanto, a menos que uno acepte que la gente ha concebido su propia suerte, ha hecho sus propias citas con el destino, sin que importe lo que Occidente quiere o cómo Occidente se ve a sí mismo y juzga a los pueblos no occidentales, siempre se sentirá un poco desconcertado por todo lo que sucede en el mundo actual, y terminará recurriendo a nociones simples, auto-halagüeñas como “deben de odiar nuestras libertades”.


El libro encara esta masiva incompatibilidad de la memoria histórica y las auto-percepciones entre Occidente y Asia.


BF: Usted escribe: “La globalización, es obvio, no conduce a un mundo plano marcado por creciente integración, estandarización y apertura cosmopolita, a pesar de los profundos deseos de algunos comentaristas”.


A continuación usted detalla algunos de sus efectos perniciosos en India contemporánea, como cuando esas “cosechas fracasadas y la espiral de las deudas llevaron a más de cien mil agricultores al suicidio en la última década”, un fenómeno que tiene que ver con el libre comercio y las políticas de ajuste estructural del Banco Mundial a favor de corporaciones globales como Monsanto.


¿Cómo es posible que, ante siglos de evidencia que erradican radicalmente la posibilidad de que el libre comercio sea un catalizador para la prosperidad general, el descubridor del mundo plano [es decir Thomas Friedman] haya convertido su descubrimiento en un extraordinario éxito de ventas, en el cual imparte estadísticas de que “cualquier aldeano indio” confirmará la necesidad de una globalización realzada?


PM: Toda época tiene sus falsos profetas, sus flautistas de Hamelín, ¿pero qué nos dice sobre nuestra propia época el que nuestro más famoso sabio global crea en el mundo plano? La historia relatada en mi libro deja claro que el “libre mercado” fue la creación de poderosas naciones Estado en Europa Occidental y luego en EE.UU. que habían acumulado diversas ventajas sobre otros países, en gran parte mediante la conquista imperial, y que este supuesto mercado libre fue impuesto a los pueblos asiáticos con la ayuda de cañoneras (y de elites locales o compradores).


Los suicidios de agricultores aumentan mientras los precios del arroz bajan


Existe por cierto mucha continuidad en el discurso occidental de libres mercados: desde los mercaderes británicos que cabildearon por un ataque a China a finales de los años treinta del Siglo XIX, a Woodrow Wilson cuando dijo que debemos “cerrar” las puertas de países que no practican el libre comercio, a Friedman quien escribió que la mano invisible debe necesariamente ocultar un “puño invisible” o no funcionará.


Por lo tanto la coerción y la profunda desigualdad inherentes en esta práctica del “libre comercio”, o el hecho de que enriqueció a una pequeña elite transnacional –empresarios extranjeros y sus colaboradores locales– y empobreció a muchos otros, siempre han sido evidentes.


¿Por qué hay tanta gente que se deja engatusar por grandiosas afirmaciones morales, la ridícula noción, por ejemplo, de que el libre mercado tiene que ver con la eliminación de la pobreza?


Pienso que para responder hay que examinar, fuera de trayectorias individuales de periodistas como Friedman, las sinergias que se desarrollaron entre políticos, empresarios, académicos y periodistas en las recientes décadas: cómo cada uno de esos personajes llegó a apoyar al otro, cómo la formulación de políticas y la formación de la opinión llegó a ser complementaria, cómo los intelectuales llegaron a ser profesionalizados, "davosados" y "aspenizados" y terminaron por susurrar consejos al poder, y cuán defectuoso pero lucrativo se produjo el conocimiento para ser luego diseminado ampliamente.


BF: En la sección de su libro sobre el poeta bengalí Rabindranath Tagore en Asia del Este, nos dice: “Para Bhudev Mukhopadhyay, tal vez el más exhaustivo crítico de Occidente del Siglo XIX, la capacidad innata de amor del ser humano se había detenido, en Europa, ante la puerta de la nación Estado”.


¿Cuál es la situación del amor en el mundo en 2012?


PM: Nuestra capacidad para el amor acrítico se ha gastado alocadamente en los últimos años en el libre mercado en lugar de en la nación Estado. Fue el falso dios que nos enseñaron a adorar durante la era de la globalización y la mayoría de nosotros lo hizo en su momento, incluso los pueblos menos emprendedores y económicamente desfavorecidos, deslumbrados por los nuevos bienes y artilugios, los modelos rutinariamente actualizados de teléfonos celulares, etc.


En 2012, después de cuatro años de una crisis causada por la incontrolada codicia, y que nadie sabe cómo terminar, podemos ver con más claridad cómo una ínfima minoría se ha enriquecido, dejando a muchos otros con el sentimiento de haber sido engañados, y expuestos a la pobreza absoluta y al sufrimiento. Su cólera y frustración tiende a provocar violentos estallidos, ya vemos que esto sucede en sitios como India y China, para no hablar de Grecia y España.


BF: Durante una visita a Persia e Irak en 1932, Tagore observó:


“Ahí encuentran su fatal destino los desesperados hombres, mujeres y niños por un decreto desde la estratosfera del imperialismo británico al que les fácil diseminar la muerte por su distancia de sus víctimas individuales. ¡Tan vagos e insignificantes parecen a los inexpertos en las modernas artes de la matanza los que disfrutan de semejante habilidad!”


¿Puede un estudio de los intelectuales asiáticos ayudar a combatir la nación sustentadora del imperio de un “otro” deshumanizado?


PM: Hay mucho más en el sitio de donde proviene ese pasaje sobre la santidad del cielo, el significado imaginativo y filosófico que ha tenido durante siglos para los seres humanos pedestres.


El motivo por el cual escogí a Tagore, quien no es un pensador sistemático o un constructor de sistemas ideológicos y más bien se le describe como poeta y visionario, fueron precisamente esos escritos, necesariamente ingenuos y no ideológicos y por ello tan conscientes de los horrores modernos. Solo alguien con una relación arraigada con el mundo y un profundo sentido del pasado podía ver la forma crecientemente impersonal y brutal de violencia desencadenada por hombres “racionales”.


No puedo hacer mejor que citar algunos de los propios escritos de Tagore de su viaje a Medio Oriente, que son particularmente relevantes a nuestra Era del Drone:


“Hay una base de la Fuerza Aérea británica en Bagdad. El capellán cristiano de esa fuerza me dio la noticia de que estaban bombardeando a diario algunas aldeas árabes. Ancianos, mujeres y niños eran asesinados indiscriminadamente desde las regiones más elevadas del imperialismo británico; era fácil matarlos porque el principio del imperialismo oculta al individuo. Cristo ha reconocido a los hombres como hijos de Dios; pero para el capellán cristiano de la Fuerza aérea el Padre junto con su Hijo se han vuelto irreales, ya no pueden ser discernidos desde la altura del imperialismo… Además,  es tan fácil matar desde el aire a los habitantes del desierto y sus poderes para tomar represalias son tan inadecuados que la realidad de su muerte también se confunde. Por ese motivo, los hombres armados de Occidente son muy propensos actualmente a olvidar la humanidad de los que aún no han aprendido sus métodos científicos de asesinato”.


Por cierto –y ese era el horrible escenario contra el cual advertía Tagore– mucha más gente ha entendido ahora los “métodos científicos de homicidio” y los terroristas de Oriente mostraron el 11-S cuán fácil es matar a miles desde el aire.


BF: ¿Hubo algo que lo sorprendió durante su investigación para el libro?


PM: Sobre todo, cuán poco sabía sobre mi tema. En particular, de esos mundos cosmopolitas pre-coloniales de Asia cuando la gente, ideas, religiones, bienes, viajaban vastas distancias. Esos mundos fueron destrozados por los imperialistas occidentales, pero la primera generación de pensadores asiáticos que describo todavía tenía un buen recuerdo de esa época, y se basaron en esa larga experiencia en sus críticas de los modelos occidentales de política y la economía.


BF: ¿Por qué titula el epílogo de su libro “Una venganza ambigua”?


PM: Bueno, precisamente porque el ascenso de Asia y su reivindicación de dignidad e igualdad frente a Occidente, dominante durante tanto tiempo, no significa nada si los países asiáticos como India y China e Indonesia siguen el mismo guión: conquista, explotación, una actitud utilitaria hacia la naturaleza, el desposeimiento y la rebatiña mundial por recursos que produjeron atroces conflictos en los últimos siglos.


El modelo de la nación Estado imperial que hizo que unos pocos países occidentales sean tan singularmente poderosos y prósperos solo puede significar un desastre político y ecológico en una gigantesca escala si es adoptado por países tan populosos como India y China. Pero eso es lo que vemos en el nuevo siglo.



Belén Fernández es autora de The Imperial Messenger: Thomas Friedman at Work, publicado por Verso en 2011. Es miembro del consejo editorial de Jacobin Magazine y sus artículos se han publicado en London Review of Books, AlterNet y muchas otras publicaciones.


rCR


Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens







Pankaj Mishra (Jhansi, norte de la India, 1969), novelista y ensayista, es sin duda uno de los más interesantes observadores de los contrastes y contradicciones entre Oriente y Occidente, capaz de aplicar a un universo y al otro su mirada atenta y erudita y su afinado sentido del humor. Acaba de recibir el Premio Internacional de Ensayo Palau i Fabre por su último libro De las ruinas de los imperios. La rebelión contra Occidente y la metamorfosis de Asia (Galaxia Gutenberg, 2014), que le ha valido también el prestigioso Windham-Campbell Prize. El libro narra el esfuerzo de siete pensadores independientes de diferentes lugares de Asia para crear una tradición intelectual propia que pudiese contrarrestar el impacto del colonialismo y servir de inspiración para el ascenso y la preeminencia del continente asiático. Esta mirada sobre la influencia política y cultural de Occidente y los procesos postcoloniales atraviesa todos sus libros, desde Los románticos (Anagrama y Empúries, 2000) , hasta Pollo a la mantequilla en Ludhiana: viaje por la India provinciana (Barataria, 2002), An End to Suffering. The Buddha in the World (Picador, 2005) oTemptations of the West: How to be Modern in India, Pakistan, Tibet and Beyond (Farrar, Straus and Giroux, 2006). Mishra colabora también con The New York Review of Books, New Yorker, Foreign Affairs, Granta, The Nation, Time y un largo etcétera.

domingo, 3 de mayo de 2015

Sondeos 24.M . El PP se estrella .

ESTIMACIÓN PROSPECTIVA DE JM&A PARA LAS MUNICIPALES

Tracking de sondeos en las capitales: la derecha sólo puede esperar que Ciudadanos salve al PP

Según el 'desk research' de JM&A, para 'Público', el PP se desploma en las siete grandes ciudades españolas, donde pierde el 29% de sus votos. Entretanto, el 'espacio Podemos' de movimientos cívicos, como Barcelona en Comú o Ahora Madrid, supera al PSOE (-9,4%) en total de concejales y votos



CARLOS ENRIQUE BAYO
Es una debacle electoral inapelable. A pesar del exagerado ascenso de Ciudadanos en las últimas encuestas, el tracking de los sucesivos sondeos en las siete grandes capitales españolas muestra que la derecha va a estrellarse en las próximas municipales del 24-M, con elPartido Popular sufriendo pérdidas de hasta el 43,3% de sus votos en Valencia o del 39,2% en Sevilla.

Eso se traducirá en un reparto de concejales con el que el PP sólo alcanzaría el límite de la mayoría absoluta en Madrid, Valencia o Málaga 
sumando en el mejor de los casos (y dentro del margen de error de cualquier sondeo) a los ediles de Ciudadanos, algo que la formación de Albert Rivera puede ser muy reacia a hacer en esas grandes urbes, donde la gestión de los conservadores se ha distinguido por los escándalos de corrupción. Pero a la derecha ya sólo le queda confiar en que C's salve al PP del naufragio.

Este gráfico muestra los porcentajes para cada partido en cada una y en el conjunto de las siete ciudades, según la estimación prospectiva de Jaime Miquel y Asociados (JM&A):

Estos resultados surgen del análisis de la situación electoral estimada por el gabinete JM&A para Público, considerando los antecedentes electorales y la demoscopia publicada sobre los ámbitos de las ciudades de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Málaga y Bilbao, y dando por supuesta una participación equivalente a la de las municipales de 2011.

Porcentajes de concejales para las municipales 2015 en las siete grandes capitales 
El Partido Popular perderá en las siete mayores ciudades de España más de 437.000 votos, casi un tercio del millón y medio que obtuvo en esas capitales en 2011
Según la tercera oleada de datos analizados por Jaime Miquel y Asociados, el Partido Popular perderá en las siete ciudades más grandes de España más de 437.000 votos, casi un tercio (28,8%) del millón y medio que obtuvo en el conjunto de esas capitales en 2011. En cambio, el otro partido de gobierno que se está viendo socavado por el fin del bipartidismo, el PSOE, sólo caerá un 9,4% en votos (perderá unos 80.000 sufragios).

La que sí se verá duramente golpeada en sus resultados  por el auge de los nuevas movimientos ciudadanos que han formado amplias coaliciones para desalojar a la derecha de las alcaldías será
Izquierda Unida, ya que perderá (como formación independiente) uno de cada dos votos (49,7%) que obtuvo en 2011. Aunque, claro está, eso se debe en gran parte a que su electorado se desplazará hacia nuevos partidos "instrumentales" creados junto a Podemos, como Ahora Madrid, encabezado por Manuela Carmena, o Barcelona en Comú, liderado por Ada Colau. Y en esta última plataforma participa Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), la marca de IU en Catalunya.

En definitiva, el espacio Podemos (la suma de todos los movimientos aliados con el partido de Pablo Iglesias) superará al PSOE en estas grandes urbes, según el tracking de JM&A, tanto en votos (797.000 frente a 770.000) como en concejales: obtiene 53 frente a los 50 socialistas (tras perder 18).

El ascenso de Ciudadanos es también notable, aunque no tan fulgurante como parecen indicar las encuestas: suma 37 concejales en estas capitales, con casi 600.000 votos. No obstante, será mucho menos decisivo que los aliados de Podemos y se encontrará en Madrid y Valencia en el brete de ser llamado a apuntalar a un PP repudiado por su caída en las urnas. 
Hasta la incombustible Esperanza Aguirre va a caer un 21% en número de votos, quedando muy lejos de la mayoría absoluta de concejales.

En esta tabla se puede ver la previsión de resultados, en concejales, de cada partido en las siete grandes capitales, comparados con los que surgieron de las municipales de 2011 (hay que 
pinchar en la tabla para ampliarla):
Previsión de concejales en las siete grandes capitales para 2015

Ahora Madrid empata con el PSOE en la capital, donde queda clara la dependencia del PP con Ciudadanos, ya que sólo su alianza daría una mínima ventaja a la derecha
De estas cifras generales queda patente que se está produciendo un cambio de orientación del electorado de las grandes urbes hacia la izquierda, puesto que las formaciones conservadoras (incluyendo en esa franja del espectro a C's) ya sólo suman 129 concejales, mientras que en 2011 el PP, UPyD y los nacionalistas conservadores (CiU y PNV) acumularon 154.




( Hay un tercer cuadro  que no sale ver el original  ...http://cort.as/R9Ki )


También 
se constata el hundimiento de la formación de Rosa Díez, ya que UPyD pierde los cinco ediles con que contaba en la capital de España, y el auge en las ciudades más grandes de los movimientos sociales aliados con Podemos: en Barcelona, Ada Colau empata en número de concejales con el alcalde Xavier Trias, de CiU, y en Madrid, Manuela Carmena consigue el mismo número que Antonio Miguel Carmona, del PSOE.
 
Es precisamente en la carrera por el Ayuntamiento de Madrid donde queda más clara la dependencia del PP con Ciudadanos, ya que Carmena y Carmona suman 24 concejales (12 cada uno), mientras que Aguirre se queda en 21, muy lejos de la mayoría absoluta de que gozaban hasta ahora los conservadores, y sólo podría convertirse en alcaldesa con el apoyo de los 9 ediles de C's... siempre y cuando los indecisos no hagan variar en el último momento ese exiguo margen de tres escaños que otorgan ahora los sondeos a la derecha madrileña, puesto que UPyD lo pierde todo.

El cambio no ha hecho más que empezar.


ver 
algunas ciudades http://cort.as/R9NI




Herr Schäuble y sus contradicciones .

Las contradicciones de herr Schäuble
Alejandro Nadal · · · · ·
 
03/05/15
 


La probabilidad de que Grecia salga de la unión monetaria europea aumentó significativamente la última semana. La reunión de ministros de finanzas de la eurozona en Riga, capital de Latvia, muestra que el gobierno de Atenas se enfrenta a un bloque compacto y que le será muy difícil convencer a los poderes europeos sobre la necesidad de cambiar la política macroeconómica en Grecia.

El encono y tono mordaz de los ministros de finanzas contra Varoufakis, ministro griego de finanzas, tenía un objetivo claro: mostrar que las pretensiones del gobierno de Syriza no tienen futuro. El mensaje fue un ultimátum y los ministros de finanzas lograron que Tsipras lo remplazara con Euclides Tsakalotos, el nuevo jefe del equipo negociador. 

Entre paréntesis, creo que los ministros de la eurozona nunca le perdonaron a Varoufakis que les hablara con un lenguaje que desconocen. Ese lenguaje es el de la macroeconomía. Imagínense, hablar de los orígenes y causas de la crisis, cuando todos saben que se trata de un cataclismo provocado por la ineptitud de los gobiernos. ¡Qué mal gusto!

La señal desde Riga es que se acerca la salida de Grecia de la esfera del euro. Y si alguien tiene dudas, que vea la conferencia del ministro alemán de finanzas, Wolfgang Schäuble, en la Brookings Institution, en Washington, hace unos días (brookings.edu). Su visión sobre la crisis y la economía mundial es reveladora.

Para empezar, Schäuble atribuye las causas de la crisis a la política monetaria y fiscal. El ministro alemán piensa que el problema de las economías capitalistas en las últimas dos décadas es que el crecimiento se ha sustentado en el endeudamiento creciente y en ciclos crediticios que tienen una fase de auge y otra de declinación y crisis. Los ejemplos que presenta son la experiencia de Japón hasta 1991 y las crisis financieras en Asia en 1997, así como el ciclo que conduce a la última crisis financiera en 2007. En conclusión, Schäuble sostiene que se ha buscado una fuente de crecimiento artificial en las políticas monetaria y fiscal y lo único que se ha logrado encontrar es un promotor de los ciclos de endeudamiento y crisis.

Consistente con este diagnóstico Schäuble piensa que el plan de recuperación en Europa sí funciona y que la prueba está en el crecimiento en España, Portugal e Irlanda. Esta expansión está conduciendo a la reducción en el desempleo. Vaya, hasta Grecia estaría comenzando a funcionar mejor: su crecimiento es positivo y ya tuvo un superávit primario. El corolario de todo esto es que el problema central en Europa, según Schäuble es el riesgo moral de ayudar a gobiernos irresponsables (léase Grecia).

El ministro alemán parece ignorar que el sistema crediticio y el endeudamiento es esencial para una economía capitalista. No se trata de un aditamento superfluo, sino de un componente medular del capitalismo. Pero Schäuble piensa que la estabilidad macroeconómica y el orden en las cuentas públicas son la clave para el crecimiento sostenido a largo plazo: la estabilidad genera expectativas favorables de largo plazo y esto permite salir del crecimiento por endeudamiento.

Pero después de criticar la práctica de recurrir al crédito en demasía para crecer, Schäuble nos informa que lo que se busca con el plan de ajuste y reformas es permitir a Grecia tener acceso ¡a los mercados financieros! Vaya, parece que se le enredó el guión al experto ministro alemán de finanzas. Por un lado nos dice que el crecimiento ha dependido del sobrendeudamiento y de los ciclos crediticios inherentes al sistema financiero, pero para Grecia hay que buscar su regreso al tenebroso mundo de los mercados financieros.
Schäuble ignora que aún las inversiones basadas en sanas expectativas de largo plazo tienen que recurrir al sistema crediticio y que es así como funciona una economía capitalista. Pero hay que informarle que los mercados financieros no tienen la propiedad que los cuentos de hadas (léase los textos de macroeconomía) les atribuyen. No son estables y tampoco pueden medir el riesgo con distribuciones normales de probabilidades porque ese mundo no existe, independientemente de cómo se forman las expectativas de los inversionistas.

Otro punto clave es la explicación sobre el superávit alemán en cuenta corriente. Según Schäuble se explica por el precio del petróleo y la apreciación del dólar. ¿De verdad creerá que estos factores coyunturales explican el desequilibrio europeo de los últimos años? Quizás lo más alarmante es la relación que establece el ministro alemán entre este superávit alemán (el mayor del mundo) y la dimensión geopolítica en la que destaca la confrontación con la Rusia de Putin. Según Schäuble hay que vencerla con el poderío económico de Alemania pues es lo que permite aplicar sanciones económicas que le duelan a Rusia.
Para estos funcionarios alemanes es claro que la Unión Europea debe responder a las necesidades del poderío alemán. Más allá del lenguaje alarmista, todo esto recuerda la descripción que hiciera la revista New Statesman de Angela Merkel como el líder alemán más peligroso desde Hitler.

Alejandro Nadal es miembro del Consejo Editorial de Sinpermiso

http://www.jornada.unam.mx/2015/04/29/opinion/026a1eco

viernes, 1 de mayo de 2015

Como la austeridad terminó de hundir a Grecia.





 Como la austeridad terminó de hundir a Grecia
http://www.rebelion.org/docs/198264.pdf


 Nota del blog...

 De los 240.000 millones que la UE y el FMI ... presto a Grecia , mas de 90% fue a las entidades financieras ,pensemos además que una parte de menos del 10%  va a pagar la deuda..por eso encima no para de aumentar .La austeridad hundió más a Grecia por que como NO es un país CON potencia exportadora ..La deflación de salarios no funciona... y además con lo de Ucrania y Rusia pendió las exportaciones allí nada menos que mas de 7.000 millones ya , y la UE sigue con recetas para todos igual y no es así , mientras que el FMI reconoce algo, la UE ni eso… Grecia ha sido sumida en una profunda regresión, a pesar de que ha aplicado al pie de la letra las famosas "reformas estructurales" que le dictaban y piden además más…Varoufakis en la ultima reunión hasta cedió en los desahucios pero en la noticia de Reuters decía al revés y ni se enteraron, se entiende ante la fuga de capitales no lo puede hacer y tanto fue así que la noticia de la agencia ponía 72.000 millones de euros y eran 7.200 millones y ni lo corrigió...ni tampoco la prensa que la publicó , así vamos... la política de la UE solo fueron rescatar a sus propios bancos y cortar cualquier contaminación griega, hecho eso con quita privada , les cargaron la factura con una mala aplicación económica...da igual con Samarás que con Syriza... en vez de devaluar hundieron el país totalmente sin posibilidad de recuperación por eso no paraban de decir que ya iban bien y había recuperación , para tapar su propio fracaso , como Varoufakis se lo demostró ,, entonces ya no lo pueden ni ver .. así vamos..Hoy Varoufakis ha tenido que corregir  a la prensa diciendo que el aun estaba al frente de la negociación..«Yo soy quien lleva la voz cantante. Todavía estoy a cargo de las negociones con el Eurogrupo y tengo el apoyo de los ministros», ha declarado en una entrevista publicada por la versión online del periódico alemánDie Zeit.

 

jueves, 30 de abril de 2015

Rato y el fin de época.






El derecho penal del enemigo.

A propósito de la condena al joven independentista gallego Carlos Calvo
La parcialidad al descubierto

De volta para Loureda/Sermos Galiza


I.- En el periplo judicial de Carlos Calvo Varela, el 2015 empezaba con una buena noticia: el Tribunal Supremo le absolvía del delito de pertenencia a organización terrorista y de esta manera rebajaba de 12 a 7 los años de cumplimiento por su relación con una mochila con explosivos intervenida en Vigo en septiembre del 2012. Uno a uno, el alto tribunal desmentía las consideraciones de la Sección Primera de la Audiencia Nacional presidida por Grande-Marlaska y emmendaba la enésima invención de nuestro ibérico TOP contemporáneo.
II.- La primavera nos llevó a un nuevo juicio, otra vez con Grande-Marlaska y Nicolás Poveda en el tribunal. Esta vez la fiscalía acusaba a Carlos Calvo de colocar personalmente un artefacto explosivo en un cajero automático en octubre del 2011. El único argumento de la acusación residía en un controvertido hallazgo en el lugar de la acción de un fragmento de carné de conducir a nombre de Carlos, carné que él mismo había denunciado haber perdido -entero-. Desde la defensa, convencidos de la falsedad de la acusación, conseguimos probar que el día de los hechos Carlos se encontraba a centenares de kilómetros de Vigo, en la fiesta otoñal por excelencia, San Froilán. La sentencia aceptó esta tesis y se vió obligada a afirmar que no se puede establecer que el acusado fuese la persona que materialmente había colocado el artefacto.
La resolución de la Sala, sin embargo, condenaba a Carlos Calvo por un hecho que no había sido objeto de debate en el juicio (y por tanto tampoco de acusación): entendía probado que él fue quien proporcionó el explosivo a los autores materiales de los hechos. No se sabe quiénes fueron los autores materiales. No se sabe en qué lugar, en qué fecha ni de qué manera Carlos les habría hecho llegar los explosivos -la sentencia no lo dice ni se esfuerza en esbozarlo- pero la responsabilidad por la tenencia del explosivo recae en Carlos Calvo y le conlleva la imposición de siete años más de privación de libertad. Como la vuelta de la primera absolución.
III.- Más allá de la crueldad de condenar a alguien sin haberlo sometido a juicio, sin haberle preguntado sobre la tenencia (el fiscal obviamente no lo hizo porque ni siquiera le formuló este cargo) y que esta condena pese sobre la espalda del reo y de su entorno hasta que la tumbe -como una célebre estaca- un tribunal superior, el atropello del principio acusatorio nos revela la parcialidad interna del tribunal enjuiciador. Una sentencia como esta deviene una prueba empírica de ello. El Tribunal ha decidido condenar antes del juicio y si no puede hacerlo a partir de la tesis de la acusación pública, improvisa en otra dirección y sienta unos hechos delictivos indiscutidos, no rebatidos y magníficamente fijados, con alevosía, porque el acusado no se podrá defender simplemente porque aparecerán en escena cuando el juico haya acabado. La pérdida de derechos es evidente, pero de donde proviene este convencimiento tan apriorístico del tribunal? Por qué un joven gallego acaba con catorce años en la espalda cuando el Código Penal castiga con seis años una agresión sexual o con diez un homicidio?
IV.- En Alemania en los años 30 y hasta 1945 grandes teóricos del derecho penal (de Mezger a la escuela de Kiel) llegaron a razonar y a plantear a fondo sobre como el derecho penal tenía que ser un derecho de lucha para atrapar el enemigo allí donde tiene su punto de partida, en la voluntad criminal. Al enemigo del nacionalsocialismo, se referían, claro. Establecieron como regla de interpretación la analogía contra el acusado, derogaron el principio de personalidad y edificaron un monstruo -como pocos- que acabó justificando la pena de muerte para supuestos de “enemistad jurídica”: comunismo, homosexualidad, aborto o ultrajes a la raza. Como fundamento estructural se hablaba de la culpabilidad por “conducción de la vida” que presumía que la aplicación de la severidad del derecho penal no tenía porqué provenir de ningún hecho concreto que fuera delito sino que era suficiente ser de una determinada manera para poder ser culpabilizado y castigado.
V.- Dice David Fernández que “en la tradición inquisitorial hispánica hay un instrumento que sintetiza la brutalidad del poder: el terrible acto de fe. Procesión, misa, sermón. Y hoguera. Y cultura del miedo. Y castigo ejemplarizante. Y aviso a navegantes.” Intuyo que la segunda condena, injusta e inmerecida de Carlos va por aquí y huele tanto a hoguera que harta. De una hoguera que quema en Berlín en los años 30 y en Madrid en 2015. Una hoguera que no necesita pruebas y se atiza alimentada de prejuicios, vanidad y mentalidad de orden de la magistratura española.
Pero el ciclo y la lucha, judicial y no judicial, continúa. Después de la primavera llegará el solsticio, y saltaremos como hemos hecho siempre por encima de las hogueras, de esta que ahora parece tan alta y de todo el resto, en una noche llena de estrellas y de aire estival y recuperaremos entonces el sentido de la palabra justicia cuando tendremos a Carlos entre nosotros.
Benet Salellas i Vilar es abogado.
Fuente:

miércoles, 29 de abril de 2015

Nuestros «zombis ilustres» de aquí y de América Latina .

La banda de «zombis ilustres» de América Latina y España arremete contra Venezuela

Medelu



En 9 de abril, antes de la Cumbre de las Américas, en compañía de los expresidentes Felipe Calderón (México), Jorge Quiroga (Bolivia) y José María Aznar (España), el expresidente colombiano Andrés Pastrana presentó con gran pompa a los medios de comunicación, en un salón de un lujoso hotel, la «Declaración de Panamá».
Firmado también por otros exgobernantes latinoamericanos, el texto denuncia «la grave alteración democrática y constitucional que sufre Venezuela» y «exige la inmediata liberación de los presos políticos y el restablecimiento de las condiciones necesarias para el ejercicio de los derechos fundamentales y las libertades públicas en ese país». Aprovechando una gran publicidad la declaración se envió a los participantes de la Cumbre, a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a la ONU. «Hacemos esto para llamar la atención de la comunidad internacional sobre lo que pasa en Venezuela con respecto a los derechos humanos», declaró Andrés Pastrana.
Solo podemos congratularnos de ver a tantos personajes eminentes preocupados por la democracia y el respeto de los derechos humanos en Caracas teniendo en cuenta que las competencias y la experiencia de cada uno de ellos son dignas del mayor respeto.
Juzguen ustedes mismos…
Andrés Pastrana. Presidente de Colombia de 1998 a 2000, período durante el cual, según la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, la situación de los derechos en cuestión se agravó considerablemente, en particular debido al auge de los grupos paramilitares vinculados al ejército que actuaban con total impunidad por todo el país. La firma, con Washington, del «Plan Colombia» (sin consultar al Congreso) tuvo como principal consecuencia prolongar y radicalizar el conflicto armado interno.
Felipe Calderón. Nadie podía imaginar que sus seis años de Gobierno (2006-2012) conducirían a México a una situación tan espantosa. Su desastrosa estrategia de militarización de la lucha contra el narcotráfico hizo estallar la utilización de la tortura por parte de las fuerzas armadas y se saldó con 60.000 muertes violentas a las que hay que añadir más de 26.000 «desaparecidos» sin conseguir ningún retroceso del crimen organizado. En cambio la tasa de población pobre (con menos de 100 dólares mensuales) pasó del 43% al 46%.
Jorge Quiroga. Nunca fue elegido presidente de Bolivia. Era vicepresidente cuando accedió brevemente al cargo de presidente (del 7 de agosto de 2001 al 6 de agosto de 2002), cuando el presidente Hugo Bancer tuvo que dimitir debido a un cáncer.
José María Aznar. Presidente del Gobierno español del 4 de mayo de 1996 al 17 de abril de 2004. Le debemos la «posición común» de la Unión Europea (UE) adoptada en 1996 –sanciones que limitaban los intercambios políticos, diplomáticos y culturales con Cuba- en nombre del alineamiento a la política extranjera de Estados Unidos.
El 12 de abril de 2002, en nombre de la Unión Europea que presidió por ser presidente del Gobierno español Aznar reconoció (sin consultar a ningún dirigente), en compañía de George W. Bush, al gobierno golpista del presidente de la patronal venezolana Pedro Carmona, que el día anterior participó en el golpe de Estado contra Hugo Chávez.
Su experiencia en materia de «derechos humanos» le ha llevado a ser asesor de Barrick Gold, número uno mundial de la extracción minera de oro, y a formar parte del consejo de administración de News Corporation, el imperio de Rupert Murdoch (The Times, Wall Street Journal, Fox News, etc.).
Eduardo Duhalde. Vicepresidente del ultraliberal Carlos Menem de 1989 a 1991, Duhalde no fue elegido, pero en plena crisis de la deuda se convirtió en el jefe del Estado «provisional» de Argentina –nombrado por el Congreso Nacional tras la dimisión de Fernando de la Rúa– del 2 de enero de 2002 al 25 de mayo de 2003. Mientras estuvo en la Casa Rosada (la presidencia), la policía reprimió brutalmente a los manifestantes, especialmente en el episodio que permanecerá en la memoria con el nombre de «masacre de Avellaneda» (dos muertos y 33 heridos de bala). Ante la indignación popular se vio obligado a convocar elecciones anticipadas.
Sebastián Piñera. Poseedor de una fortuna de 2.400 millones de dólares, este «Berlusconi chileno» (2010-2014) que no dudó en meter a antiguos colaboradores del régimen militar de general Augusto Pinochet en su Gobierno, reprimió en 2011 las innumerables manifestaciones de estudiantes –muchas de ellas acabaron con cientos de detenidos (870 el 4 de agosto)- que reclamaban una educación pública, gratuita y de calidad. Contra los mapuches –comunidades autóctonas que protegen sus tierras ancestrales de la expansión de proyectos de explotación forestal- el poder aplicó la ley antiterrorista heredada de la dictadura de Pinochet. En virtud del artículo 269 de la ley Hinzpeter, los que participasen en «alteración del orden público» o cualquier otro acto violento podrían ser condenadod a penas de 541 días a tres años de prisión.
Álvaro Uribe. Cercano al «narco» Pablo Escobar cuando era alcalde de Medellín (1982), principal promotor e iniciador de las cooperativas de seguridad rural –las CONVIVIR, posteriormente unidas a los paramilitares- cuando ejerció la función de gobernador de Antioquia (1995-1997). Sus dos mandatos presidenciales (2002-2006 y 2006-2010) estuvieron marcados por una sucesión de escándalos sangrientos. En el denominado «de la parapolítica» más de 60 diputados y senadores (entre ellos su primo Mario Uribe) pertenecientes a su movimiento político fueron investigados, detenidos o condenados (32) por sus vínculos con los narcoparamilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
En el marco de las «chuzadas» el presidente del Tribunal Supremo, así como numerosos magistrados, periodistas y opositores fueron espiados por la policía política (Departamento Administrativo de Seguridad, DAS). La práctica de los «falsos positivos» vio a los miembros del ejército colombiano asesinar a civiles inocentes -2.700 según el ministerio fiscal (septiembre de 2011)- con el fin de hacerlos pasar por guerrilleros muertos en combate. Jefe de seguridad y hombre de confianza de Uribe en el Palacio de Nariño (el palacio presidencial), el general Mauricio Santoyo, fue condenado en diciembre de 2012, en Estados unidos, a 13 años de cárcel por su relación con el narcotráfico.
Belisario Betancur . Bajo su presidencia, el 6 de noviembre de 1985 un comando del M-19 sitió el Palacio de Justicia, donde reside el Tribunal Supremo, tomando como rehenes a más de 100 personas. Los guerrilleros exigían negociar con el presidente, pero este se negó y el asalto del ejército se convirtió en una carnicería: un centenar de muertos, la mayoría guerrilleros, 11 jueces del Tribunal Supremo y los empleados del Palacio de Justicia, a los que hay que añadir 11 desaparecidos.
Miguel Ángel Rodríguez. Presidente de Costa Rica de 1998 a 2002, brevemente (un mes) secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA) en 2004, fue condenado el 27 de abril de 2011 a cinco años de prisión por corrupción agravada (un soborno de 819.000 dólares por la adjudicación de un contrato de telefonía móvil a Alcatel) y posteriormente absuelto por apelación. Tras esta decisión el Tribunal Supremo envió el caso a revisión en noviembre de 2014.
Rafael Ángel Calderón. Presidente de Costa Rica de 1990 a 1994. Acusado de cobrar comisiones por la compra de material médico en 1992 por cuenta de la seguridad social, fue condenado a cinco años de prisión por corrupción en octubre de 2009 y no pudo participar, como deseaba, en la elección presidencial de febrero de 2010.
Laura Chinchilla. Cuando dejó la presidencia de Costa Rica, el 8 de mayo de 2014, una huelga general de profesores inundaba las calles de manifestantes que denunciaban los retrasos salariales. Quedará de su mandato el escándalo que estalló cuando se reveló que en marzo de 2013, a causa de la incuria de su ministro de Comunicación y jefe de los servicios de inteligencia (que tuvo que dimitir), ella utilizó para un desplazamiento oficial y después para un viaje privado a Perú un jet puesto a su disposición por Gabriel Morales Fallon, un hombre de negocios colombiano sospechoso en su país de estar relacionado con traficantes de drogas.
Óscar Arias. Otro expresidente de Costa Rica. Recibió el Premio Nobel de la Paz en 1987 por su papel en los procesos de paz de América central (El Salvador, Nicaragua, Guatemala), aunque siempre intentó marginar a la Nicaragua sandinista. Para evitar que la OEA (dominada por los gobiernos de izquierda y centroizquierda) gestionase la crisis de Honduras tras el derrocamiento, en junio de 2009, del presidente Manuel Zelaya, se le confió el papel de «mediador» gracias a las maniobras de la secretaria de Estado Hillary Clinton. Al retrasar el asunto permitió a los golpistas consolidar sus posiciones e impedir el regreso de Zelaya a su país antes de la organización de las elecciones bajo control (el 29 de noviembre de 2009) que permitieron «lavar» el golpe de Estado.
Luis Alberto Monge . Elegido presidente de Costa Rica en 1982. Aunque declaró neutral a su país cerró los ojos ante las actividades de los grupos antisandinistas a cambio de una importante ayuda económica de Estados Unidos en la época de Ronald Reagan. Durante su mandato el embajador estadounidense Lewis Tamb y la CIA, con el apoyo de las fuerzas de seguridad costarricenses, abrieron una pista de aterrizaje utilizada para suministrar armas al frente sur de la «contra» -financiadas por el tráfico de cocaína organizado con el cártel de Medellín por la CIA-.
Osvaldo Hurtado. Vicepresidente ecuatoriano, llegó al poder sin ser elegido tras la muerte en 1981, en un accidente aéreo, del líder del Estado progresista Jaime Roldós. Candidato en tres ocasiones a la magistratura suprema perdió todas, en su último intento consiguió menos del 1% de los votos.
Lucio Gutiérrez. Presidente ecuatoriano destituido por el Parlamento el 20 de abril de 2005 tras un levantamiento popular, estuvo implicado en el intento de golpe de Estado fomentado el 30 de septiembre de 2010 por policías amotinados contra el presidente Rafael Correa.
Alfredo Cristiani . En el poder en El Salvador de 1989 a 1994, fue elegido bajo los colores de la Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), partido asociado a los escuadrones de la muerte de extrema derecha fundados por el mayor Roberto D’Aubuisson para sofocar cualquier oposición. Bajo su mandato, con el pretexto de luchar contra la guerrilla del Frente Farabundo Marti de Liberación Nacional (FMLN), el ejército asesinó a seis jesuitas, entre ellos el rector de la Universidad Centroamericana (UCA), Ignacio Ellacuría, muy implicado en la búsqueda de la paz. Para apaciguar la indignación de la comunidad internacional, Cristiani prometió que se juzgaría a los responsables. La mayoría fueron absueltos por un jurado en 1991 antes de que Cristiani decretase una amnistía en abril de 1993… unos días antes de la publicación de un informe de investigación de las Naciones Unidas que demostraba la implicación de las mayores autoridades del ejército (y de Estados Unidos). Cuando en Nueva York, el 31 de diciembre de 1992, se firmó un acuerdo de paz con el FMLN, Cristiani no rubricó personalmente el documento.
Armando Calderón Sol. Sucesor de Alfredo Cristiani en la presidencia de El Salvador, (1994-1999) también del partido ARENA del cual es uno de los fundadores. Su Gobierno se distinguió especialmente por la amplitud de las «reformas» y las privatizaciones.
Vicente Fox . Presidente de Coca-Cola para México y América Latina, fue elegido para seis años jefe del Estado de México el 2 de julio de 2000 por el Partido de Acción Nacional (PAN). En su celo neoliberal multiplicó las privatizaciones (agua electricidad, parques naturales, sitios arqueológicos, etc.), en el contexto de los megaproyectos continentales previstos en el plan Puebla-Panamá (PPP), concebido en vista de la concretización de la Zona de Libre Comercio de las Américas (ZLEA) que quería Estados Unidos. Esos proyectos se enfrentaron a una viva resistencia, se desencadenó la represión a través de la militarización y la emergencia de grupos paramilitares, en particular en los estados (Chiapas, Guerrero, Michoacán, Oaxaca) donde sobrevive el 80% de la población indígena.
Alejandro Toledo. A la cabeza de Perú de 2001 a 2006, enemigo de las empresas públicas y continuador de las políticas neoliberales del dictador Alberto Fujimori, que huyó del país, se mostró particularmente complaciente con el capital extranjero. Acabó su mandato muy impopular, los peruanos le reprochan no haberse beneficiado de los frutos del crecimiento a pesar de que la economía estaba mejor desde hacía cinco años. Se volvió a presentar a las elecciones presidenciales en abril de 2011 y perdió frente a Ollanta Humala con el 16% de los votos.
Luis Alberto Lacalle. Representante del ala derecha del Partido Blanco, partidario declarado de las políticas económicas liberales, fue presidente de Uruguay de 1990 a 1995. El 13 de diciembre de 1992 un referéndum de iniciativa popular anuló (con casi el 75% de los votos) cinco de los 32 artículos de su ley general sobre las privatizaciones, laboriosamente aprobado tras seis meses de debate. El 28 de agosto de 1994 el pueblo, resueltamente insumiso, rechazó con el 63% de los votos una reforma constitucional confusa que preveía, entre otras cosas, la reforma del sistema electoral y de las prestaciones sociales.
Nicolás Ardito Barletta. Tecnócrata panameño, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe (1978-1984), ganador de la elección presidencial de mayo de 1984, fue obligado a dimitir el 28 de septiembre de 1985 por el general Manuel Antonio Noriega.
Mireya Moscoso. Gobernó Panamá de 1999 a 2004 y apareció en las portadas debido a su gusto por los vestidos de lujo y las joyas pagadas con dinero del Estado. Tras una temporada revuelta por la utilización irregular, en una fundación que dirigían sus próximos, de una donación de 45 millones de dólares efectuada por Taiwán, consiguió salir del paso. Aliada de Estados Unidos, bajo presión de Washington el 26 de agosto de 2004, último día de su mandato, amnistió «por razones humanitarias» al terrorista anticastrista Luis Posada Carriles. Arrestado cuando preparaba un atentado con bomba contra Fidel Castro en visita en Panamá en noviembre de 2000, Posada Carriles fue condenado a ocho años de cárcel. Agente de la CIA, autor intelectual de un atentado contra un DC-8 de la Cubana de Aviación que causó 73 víctimas en Barbados en 1976, Posada Carriles vive actualmente con total impunidad en Miami (donde también reside Mireya Moscoso).
A todos estos firmantes de la «Declaración de Panamá», agrupados en la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), se unió el «socialista» Felipe González. En este lindo ramillete no desmerece. El 26 de septiembre de 1983, entonces presidente del Gobierno Español, condecoró al almirante Rubén Franco, uno de los jefes de la dictadura argentina (condenado después por robo de bebés) con la Gran Cruz de la Orden del Mérito Aeronáutico. El contraalmirante Ciro García, colaborador del dictador Jorge Videla, vinculado a los servicios secretos, también recibió de sus manos la misma distinción. También durante el Gobierno de Felipe González, de 1983 a 1986, surgió el escuadrón de la muerte de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) que asesinaron a 17 separatistas vascos en suelo francés.
«Aunque su toma de posición sea puramente simbólica, ha comentado el politólogo Lansberg-Rodríguez en la revista estadounidense Foreign Policy  (reproducida sin una pizca de reflexión por Courrier International ), contribuye a desmontar el relato oficial de la solidaridad entre países latinoamericanos frente al imperialismo estadounidense».
Lo que se denomina confundir los deseos con la realidad, porque esta banda de «zombis ilustres», sin ninguna legitimidad para impartir lecciones, ha sido claramente repudiada por los jefes de Estado en ejercicio. Frente al decreto del presidente Barack Obama que calificaba a Venezuela de «amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos», tanto la Unión de las Naciones Sudamericanas (UNASUR) como la Comunidad de los Estados Latinoamericanos y el Caribe (CELAC) manifestaron un rechazo unánime declarando que la injerencia de Estados Unidos en la región «crea una gran tensión» y reclamaron su abrogación. Por otra parte, durante la Cumbre de las Américas que la máquina simplificadora mediática resumió como «el histórico pulso entre Raúl Castro y Obama», las presiones e intervenciones estadounidenses fueron denunciadas vigorosamente por los jefes de Estado de Bolivia (Evo Morales), Ecuador (Rafael Correa), Venezuela (Nicolás maduro) y Argentina (Cristina Kichner), con el asentimiento de sus homólogos continentales e insulares –la Comunidad de los Caribes (Caricom, 13 estados)- que se distinguieron en su solidaridad con Caracas. Finalmente, y después de que Obama abandonase la asamblea plenaria para evitar oír las críticas dirigidas a Estados Unidos, no se firmó ninguna «declaración final» de consenso entre «yankis» y «latinos».
Maurice Lemoine es autor del libro Les enfants cachés du général Pinochet. Précis de coups d’Etat modernes et autres tentatives de déstabilisation( Los hijos ocultos del general Pinochet: compendio de golpes de estados modernos y otras tentativas de desestabilización) Don Quichotte, París, 2015.Fuente: http://www.medelu.org/Quand-le-gang-des-has-been-d

Traducido del francés para Rebelión por Caty R.