sábado, 14 de julio de 2018

Los ahorcados de Londres .


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Cuando se ahorcaba a los pobres




Antoine Lilti






Todavía por traducir al español, The London Hanged: Crime and Civil Society in the Eighteenth Century [Los ahorcados de Londres: Crimen y sociedad civil en el siglo XVIII] (Londres, Allen Lane, 1991), primer libro importante de Peter Linebaugh, acaba de ser traducido al francés con el título de Lespendus de Londres. Crime et societé civile au XVIII siècle por la editora radical Lux Editeurs. Recogemos dos reseñas recientes que acaso animen a una pronta publicación en lenguas peninsulares. S 
El paseante londinense que pasa por el ángulo noreste de Hyde Park no dudará de que en ese lugar se levantaba la siniestra horca de Tyburn, de la que se colgaba varias veces al año a los condenados a muerte. En un libro que hizo época, publicado en 1991 en Inglaterra, reeditado varias veces y por fin traducido al francés, el historiador norteamericano Peter Linebaugh ha querido saber quiénes eran esos desgraciados y qué delitos les condujeron a este triste fin. El resultado es un libro impresionante y desbordante: un fresco vibrante de la clase obrera inglesa en el amanecer del capitalismo.
Linebaugh demuestra, gracias a una minuciosa investigación en los archivos judiciales, que los ahorcados de Londres sólo muy raramente eran delincuentes encallecidos. Más a menudo se trataba de trabajadores pobres, marineros, artesanos, criados, condenados por haber robado algunos objetos. Tyburn se convirtió en símbolo de la criminalización de los pobres, emblema de una violencia ejercida por las élites contra esta población obrera cuyos hábitos, solidaridades y tradiciones entorpecían el auge del capitalismo inglés. En la línea del gran historiador inglés, E. P. Thompson, del que fue alumno, Linebaugh insiste en la contradicción entre las costumbres populares que consistían, por ejemplo, en substraer un poco de materia prima para consumo personal, y el carácter ya para entonces sagrado de la propiedad individual. La “col” de los sastres, compuesta de pedazos de tela sobrante enrollados en una pelota, era considerada un robo, lo mismo que el ron extraído de los barriles por los marineros. Esas formas de apropiación, hasta entonces toleradas e incluso inscritas en el corazón mismo de las relaciones de trabajo, podían en adelante llevar directamente  a la horca. El robo, a cambio, se convirtió en una forma de contestación del nuevo orden económico, del mismo modo que las numerosas evasiones de la cárcel, muy populares entre el público inglés, desafiaban la represión.
Los ahorcados de Tyburn habrían sido, por tanto, víctimas de una violenta lucha de clases. La “tanatocracia”, ese sistema represivo fundado sobre la pena de muerte, constituiría la faz sombría del surgimiento del salariado. Digámoslo: esta explicación demasiado sistemática, sin matices, no convence por completo. Se podría objetar que la represión judicial era bastante más severa en los siglos precedentes y que los ahorcamientos cesaron precisamente en Tyburn a finales del siglo XVIII, en el momento en que la Revolución Industrial cobraba impulso. Por otro lado, el peligro consiste en identificar de forma demasiado general delincuencia y pobreza, en nombre de un romanticismo de la ilegalidad. Pero en el fondo estas reservas no afectan a lo esencial, pues la potencia y riqueza de este libro llegan bastante más allá: atañen a la reconstitución minuciosa e inspirada del Londres popular.    
Peter Linebaugh posee un talento innegable para hacer revivir el mundo de marineros y tejedores, mozos de cuerda y carniceros, de prostitutas y carpinteros. El crecimiento demográfico de Londres, que llegó al millón de habitantes a finales de siglo, hacía de la ciudad un crisol popular y cosmopolita en el que convergían miles de irlandeses, antiguos esclavos negros, soldados tullidos, refugiados venidos de toda Europa, atraídos todos por la promesa de libertad religiosa y por la prosperidad económica, todos obligados a vivir en condiciones precarias. El libro está repleto de anotaciones concretas sobre el mundo de los oficios, de visiones sobre los horizontes lejanos del comercio imperial. Nutrido de referencias literarias, atravesado de un aliento indiscutible, Los ahorcados de Londres tiene a veces la apariencia de una epopeya del pueblo llano londinense. Linebaugh no quería estudiar solamente a los ahorcados de Tyburn, deseaba rendirles homenaje y defender su memoria. Hacía falta para ello que la sensibilidad del militante se aliara a la erudición del historiador. Siguiendo este plan, la apuesta se sostiene por entero.  
Fuente: L´Obs, nº 2799 , 28 de junio-4 de julio de 2018

Las normas nacientes del capitalismo se entreveían a la sombra de un patíbulo londinense en el siglo XVIII  

En el extremo noreste de Hyde Park se alzaba la horca de Tyburn, «árbol de los ahorcados» de Londres. De 1571 a 1783 fueron allí ejecutadas en público 50.000 personas. Analizando las decisiones judiciales que llevaron a esas detenciones y a las confesiones de los atormentados recogidas por los capellanes que comerciaban con ellas, el historiador borteamericano Peter Linebaugh muestra que en el siglo XVIII Tyburn sirvió sobre todo para castigar los atentados contra la propiedad y de falsificación de moneda cometidos por artesanos cualificados, aprendices y marineros de todos los orígenes, londinenses, ingleses, irlandeses y extranjeros.
Prototipo de esta «historia desde abajo», del punto de vista de los dominados, inaugurada por el británico Edward P. Thompson, la obra reconstruye los conflictos de clase nacientes en el «taller del mundo» que era Inglaterra entonces. Tolerada antes como complemento de la remuneración, la sisa se convierte en un delito mayor, y la propiedad privada, en un absoluto. Para implantarse, el capitalismo exige una mutación antropológica profunda. Es preciso quebrar la indolencia de nacimiento de los pobres y sus veleidades de independencia, meter en la cabeza de los futuros obreros de la gran industria las normas económicas, jurídicas y morales del nuevo sistema. Junto a esta lección contundente de sociología histórica, los relatos de vida de los ahorcados hacen de este libro un cuadro apasionante del Londres de las «clases peligrosas», una vibrante Comédie humaine de los sin poder.
(Sin firma).
Fuente: Le Nouveau Magazine Littéraire, no 6, junio de 2018


profesor de Historia en la École Normale Supérieure, es editor de la célebre revista Annales: Histoire, sciences sociales. Y autor ente otras obras de Le Monde des salons: Sociabilité et mondanité à Paris au XVIIIe siècle (París, Fayard, 2005).
Fuente:
Varias
Traducción:

Lucas Antón 
 
 
 Nota  .-  Peter Linebaugh  tien otro singular libro traducido al castellano



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Howard Zinn  lo ha calificado como «un libro maravilloso en que Linebaugh y Rediker han hecho un extraordinario trabajo, investigando una serie de episodios enterrados y escritos olvidados, para recuperar, con elocuencia y talento literario, la historia perdida de la
resistencia a la conquista capitalista en las dos orillas del Atlántico».
  http://cort.as/-7xfW

jueves, 12 de julio de 2018

Llarena , cada vez más liado .

La suspensión

De todos los delitos por los que podían ser juzgados quienes, según el estado actual de cosas, aparecen como principales responsables judiciales del proceso, se eligió la rebelión , un delito más aplicado en democracia por la jurisdicción ordinaria.
Cabe reiterar una vez más que ninguno de los delitos por los que se han abierto diligencias se ha dado en la realidad. Cabe reiterar una vez más la arbitrariedad del enjuiciamiento a que se somete a los anteriores presidente, consejeros, integrantes de la Mesa del Parlamento y los miembros de la sociedad civil, los Jordis.
Pero aún no respondemos a la cuestión del primer párrafo: ¿por qué se han elegido estos delitos, delitos que, como ya hemos visto, los tribunales europeos no compran. La razón radica en el artículo 384 bis de la ley de Enjuiciamiento Criminal (LECr):
"Firme un auto de Procesamiento y decretada la prisión provisional por delito cometido por persona integrada o relacionada con bandas armadas o individuos terroristas o rebeldes, el Procesado que estuviere ostentando funciones o cargo público quedará automáticamente suspendida en el Ejercicio del Mismo Mientras dure la situación de prisión. "
Es decir, la norma se refiere a sujetos integrados en bandas armadas o que están relacionados, o que son terroristas o rebeldes ellos mismos. Para estos encausados, cuando el procesamiento es firme (no hay lugar para más recursos) y se encuentren en prisión provisional, se produce la suspensión automática de sus cargos públicos, sean electos o no.
Lo adelantamos en su día que con respecto a la previsión legal de los individuos rebeldes. La cosa no era pan comido. Si se aplica la ley, ley bastante maltratada hasta ahora por quien más y mejor debería aplicar y garantizar, la respuesta debe ser negativa: no puede tener lugar ninguna suspensión.

Si se aplica la ley no puede tener lugar ninguna suspensión

Vayamos por partes. De dónde sale este precepto de la LECr? La ley orgánica 4/1988 entre otras modificaciones legales fue la que le introdujo. Posteriormente, este precepto fue objeto de un doble recurso de inconstitucionalidad por parte de los parlamentos catalán y vasco, que resolvió la STC 199/1987 . Si bien es cierto que sostuvo que el artículo 384 bis era constitucional, fijó su contenido en su fundamento jurídico 4º, párrafo 7º.
La cuestión que se dilucidaba era si las limitaciones de derechos previstos en el artículo 55. 2 de la Constitución daban cobertura a la limitación prevista en el referido artículo 384 bis. Con una simple lectura de la mencionada disposición constitucional se ve que no hace ninguna referencia a rebeldes ni a rebelión.
A fin de mantener la constitucionalidad del precepto, en unos años en los que tanto la sangría terrorista era aterradora como la amenaza del golpismo se había hecho patente el 23-F, el Tribunal Constitucional (TC) dio al artículo 384 bis su alcance constitucional. Esto significa que este y no otro es su contenido y que, por tanto, es de obligatorio acatamiento para todos los tribunales. Este radio de acción queda así fijado y no lo pueden rehuir, ampliándolo o modificándolo, los órganos judiciales.
El TC dijo:
"Se Cierta que el art. 55.2 [de la Constitución] no ha mencionada expresamente a los rebeldes, sino solo a las bandas armadas o Elementos terroristas. Sin embargo, no menoscabe duda de que, como señal el Letrado del Estado, la rebelión es la más grave de las acciones delictivas susceptibles de ser realizadas, o intentadas, por una banda armada. Por definición, la rebelión se realiza por un grupo que Tiene el propósito de uso ilegítimo de armas de guerra o explosivos, con una finalidad de produc la destrucción o eversión del orden constitucional. A su vez el art. 8 de la Ley Orgánica 9/1984 equipara la integración en una organización rebelde a la integración en una banda armada, refiriendose a la utilizacion de 'armas de fuego, bombas, granadas, sustancias o aparatos explosivos o mitjans incendiarios de cualquier clase'. Por ellos a tales rebeldes en cuanto integran el concepto de banda armada del arte. 55.2 de la Constitución, las resulta legítimamente aplicable la suspensión de Derechos a la que habilita el precepto constitucional. "
Sólo los procesados ​​y encarcelados que hayan utilizado armas de guerra o explosivos se les podrá aplicar la suspensión automática
O sea, los sujetos a los que se refiere el artículo 384 bis LECr, dejando de lado los sujetos integrados en organizaciones terroristas, son aquellos rebeldes que integran una banda que se sirve para sus fines de armas de guerra o explosivos a fin de derribar el régimen constitucional.
Ni los hechos que son públicos y notorios ni de lo que hasta ahora han dicho las diversas resoluciones judiciales, tanto de la Audiencia Nacional (Juzgado Central de Instrucción número 3 y Sala de lo Penal -cuando eran competentes-) como la Sala de Admisión, el juez instructor y la Sala de Apelaciones del Tribunal Supremo, hay ningún elemento que permita considerar que los procesados ​​por el delito de rebelión -sin de base, lo reiterem- han cometido la variante más grave, con el uso organizado de armas de guerra o explosivos.
Dicho de otro modo, de las diversas modalidades de rebelión previsto en el Código Penal, a los procesados ​​y encarcelados que hayan cometido el delito agravado por haber usado armas de guerra o explosivos se les podrá aplicar la suspensión automática prevista en el artículo 384 bis LECr. Este precepto, al fin y al cabo, sólo se convierte constitucionalmente aplicable a una clase de autores de las diversas modalidades del delito de rebelión: quienes han procedido con armas de guerra o con explosivos.
Como este obviamente no es el caso, la suspensión automática de funciones o cargos públicos una vez sea firme el procesamiento para los que se encuentran en prisión provisional no puede darse.
Esto es el plano legal y constitucional. Que se cumpla no depende ni de los procesados ​​ni de los que, con mucha preocupación, observamos los acontecimientos procesales con una brizna de esperanza no confirmada, a la vista de la experiencia, por la aplicación del ordenamiento jurídico.

  Joan J. Queralt  es catedrático de derecho penal .




 Nota  .-  Ver resumen de la sentencia  http://cort.as/-805S ... El diputado "temporal": el último invento del juez Llarena para forzar la ley.. Esta figura de un diputado que asume "temporalmente" los cargos y funciones no está contemplada por el reglamento del Parlament, ni en la LOREG, ni en ninguna parte. esta previsión "no tiene ninguna base", porque sería como "nombrar diputados provisionales", y no simplemente delegar el voto como hasta ahora hacían. un acta que es personal e intransferible y a la que sólo pueden renunciar ellos, no el grupo. En caso de renuncia a esta acta "temporal", presentada a la Mesa, se tendría que correr de nuevo la lista, impidiendo a los diputados suspendidos recuperarla ..
Y solo le faltaba a Llarena que hoy 12/ 7/ 2018 ,el tribunal alemán   decida solo estraditar a  Puigdemont solo por malversacion y negar la rebelión  ,  malversación que Montoro y Rajoy negaron. menudo lio  ....http://cort.as/-84Vz y  qué ridiculo mas espantoso, encima ahora los de españa son presos politicos .http://cort.as/-84lW .
Lo que es claro es que ni en Alemania, ni en Bélgica, ni en Dinamarca, ni en Escocia, ni en Suiza se considera que haya habido delito de rebelión ni de sedición. Y no creo que haya una conspiración de esos países contra España. Más bien parecería que los fiscales y el juez encargados de la causa utilizaron, o se les hizo utilizar la justicia como represalia. Si así fuera, y calmadas las pasiones, habría que pensar muy bien que esa utilización de la justicia que hoy les tocaría padecer a otros mañana le puede tocar a uno. La instrucción de Llarena se va a pique, esperemos que no llege a Estrasburgo , sino incluso tendremos que darles indezminización....La no extradición por rebelión es firme y definitiva. Contra la extradición por malversación?¿ cabe recurso y se recurrirá. La batalla continua y continuará salvo que se retire la orden. Han perdido, punto. Hay presos políticos (ninguno está en preventiva por malversación, ni hay instrucción sobre esa causa) en en el reino de España, en opinión del tribunal superior del Estado alemán de Schleswig-Holstein. Gravísimo precedente, y estaban avisados, pero ni por esas. Espero que Montoro sea requerido en la apelación.
El auto de Llarena es un conjunto , .. todos para el son culpables de rebelión ..y, sedición ..TODOS ... pero el tribunal aleman lo desmonta En el auto de las euroórdenes, Llarena consideraba (en condicional) la rebelión un “delito plurisubjetivo”, es decir, un único delito cometido entre varias personas que se han repartido los papeles, lo que aconseja juzgar a la vez a todos los que han participado, no solo a algunos. Por ese mismo motivo se han acumulado todas las causas en una. Si la extradición llegara acompañada de la prohibición de juzgarles por rebelión, afectaría negativamente a toda la causa, y así no va a ningun lado ya , cayo en su propia trampa . Dejaron al Supremo a los pies de los caballos.   . pues no es porque no se lo hubieran dicho .. aqui 100 penalistas dijeron lo mismo , o sea que no es solo por la  ley alemana sino la española lo mismo .
 Era  fundamental  condenar a Puigdemont ,por  rebelión y  sedición , por ser el jefe  y los otros los subordinados, ahora sino condena al jefe , o lo condena solo por malversación , ¿cómo va condenar a los subordinados por rebelión y sedición ? .(Refrescando la memoria .http://cort.as/z8-4) 


 

lunes, 9 de julio de 2018

La lepenización de europa.

La UE asume una política migratoria lepenizada


 Rafael Poch .

 Eurasia.
El nacionalismo alemán se derechiza y confirma la tendencia general


La última cumbre de la UE, en los últimos días de junio, vino precedida, el 19 de junio, por una reunión preparatoria Merkel-Macron. El Presidente francés, al que se presentó como la “esperanza blanca” de la UE, no pinta nada. “Merkel y Macron acuerdan un presupuesto para la zona euro”, celebraba el titular. La simple realidad es que ya no queda absolutamente nada de la propuesta de Macron para “refundar Europa” sin tocar su andamiaje neoliberal.
El “presupuesto de la zona euro” de Macron debía ser (se suponía) para financiar todo aquello que la austeridad germana asfixió. Tenía que ser “un presupuesto de varios puntos del PIB de la zona euro”. Merkel aclaró que nada de eso: sería un “presupuesto de dos dígitos” (es decir inferior a los 100.000 millones, o sea calderilla) y encaminado a la “competitividad y la convergencia”, es decir cero keynesianismo. Hasta el cándido François Hollande obtuvo más, la última vez que propuso algo parecido a Merkel. Respecto a los otros puntos del programa de Macron, “parlamento de la zona euro” (¿para hacer qué?), “convenciones ciudadanas” para discutir el futuro de la UE, etc., hace tiempo que nadie se lo toma en serio.
Hubo que esperar diez días, al 30 de junio, para comprender quién había marcado línea en aquella cumbre: la derecha alemana. Ninguna sorpresa, la derecha alemana gana siempre en la UE. La “línea europea” es básicamente el mínimo común denominador del conjunto, orquestado por el nacionalismo alemán. La novedad es que ese nacionalismo se derechiza. En el Bundestag ya tenemos el mayor grupo parlamentario de extrema derecha del continente: 92diputados. Merkel no quiere que su CDU sea erosionada por la derecha, así que cede ante la propia extrema derecha de su familia política, la CSU bávara, que está muy cerca de la Alternative für Deutschland.
Con italianos, austriacos y otros presionando, y con ese panorama interno, el resultado de la cumbre ha sido una política migratoria de extrema derecha que confirma la gran tendencia del neoliberalismo, la lepenización de Goldman-Sachs: 1-Refuerzo de las fronteras exteriores de la UE vía la ampliación de las competencias y el presupuesto de Frontex, la agencia europea competente, 2 – Incrementar la repatriación de emigrantes irregulares estableciendo campos de concentración en África del Norte y en el interior de la UE, instalaciones que llevarán nombres de camuflaje como “centros de control” o “plataformas de desembarco”.
Desde 2014, 16.000 emigrantes han perdido la vida en el Mediterráneo tratando de alcanzar Europa, unas 35.000 desde el año 2000, según la agencia de refugiados de la ONU. Según la International Organization for Migration, por cada ahogado en el Mediterráneo, habrían dos que sucumben en el Sahara. En los últimos catorce meses, unos 13.000 refugiados y emigrantes fueron abandonados por las autoridades argelinas en los confines de su frontera con Níger, incluidos mujeres y niños, informó a finales de junio la agencia AP, según la cual algunos de ellos murieron desaparecidos en aquel tránsito. La presión organizada europea, con fondos y directivas, sobre los países norteafricanos y subsaharianos conduce a cosas así.
Mientras toma cuerpo una política europea de extrema derecha, la izquierda no parece capaz de ir más allá de la acogida in extremis de los necesitados y a largo plazo agitar un vago sueño angelical sin fronteras que es un subproducto humanitario de la mundialización neoliberal. No hay política, solo caridad y “derechos humanos”. No hay estados nacionales soberanos, ni internacionalismo, solo ONG´s y políticas de imagen con el último contingente humano a la deriva en el Mediterráneo. A partir de ahí muchos cortocircuitos, porque en ese cuadro se puede ser, como el Partido Verde alemán, a la vez liberal-caritativo en materia del escándalo humanitario en el Mediterráneo y gran sostenedor de las intervenciones militares occidentales, que es uno de los ríos que alimentan el flujo emigrante.

viernes, 6 de julio de 2018

La “lepenización de Goldman-Sachs”.


Antes de que la lepenización de Goldman-Sachs nos robe todas las banderas

 
Eurasia


La política migratoria de la UE es síntoma de una tendencia y reto para una izquierda sin soluciones


En el lento tránsito de la Unión Europa hacia su fragmentada y disgregada inoperancia, asistimos a la coalición del neoliberalismo con la extrema derecha política. Es lo que bauticé como la “lepenización de Goldman-Sachs”. La cumbre de finales de junio adoptó una política de extrema derecha en materia de refugiados: 1-Refuerzo de las fronteras exteriores de la UE vía la ampliación de las competencias y el presupuesto de Frontex, la agencia europea competente, 2 – incrementar la repatriación de emigrantes irregulares estableciendo campos de concentración en África del Norte y en el interior de la UE, instalaciones que llevarán nombres de camuflaje como “centros de control” o “plataformas de desembarco”.
Mientras los jefes de estado europeos alcanzaban -de madrugada e in extremis, como viene siendo habitual- estas resoluciones, la semana se saldaba con por lo menos 220 personas ahogadas en el Mediterráneo, según la estimación de la agencia de refugiados de la ONU. Desde 2014, 16.000 han perdido la vida tratando de alcanzar Europa, unas 35.000 desde el año 2000, según la misma agencia.
Lo peor está por venir
Aunque el actual flujo migratorio hacia Europa no es significativo para un conjunto de 500 millones de habitantes -y comparado con la situación en Líbano o Turquía es francamente insignificante- logra potenciar la “lepenización” política en muchos países a causa del encogimiento del estado social y de la competencia entre pobres autóctonos y pobres foráneos, hasta el extremo de alterar los mapas políticos nacionales.
Lo que comenzó siendo un fenómeno francés con el éxito del Frente Nacional de Le Pen, afecta ahora a muchos países europeos. La novedad es que esta “lepenización” se ha instalado en Alemania. La canciller Merkel, que en 2015 se marcó el brevísimo farol de acoger emigrantes por una mezcla de razones de imagen y de falta de mano de obra, ha visto como en dos años se formaba en su Bundestag el mayor grupo parlamentario de extrema derecha de Europa (92 diputados). La derecha alemana no ha tenido ningún problema en asumir el programa lepeniano, que ha llegado al poder en Italia, en Austria y otros países, bajo el impulso de la retrograda CSU, el partido que gobierna Baviera prácticamente sin interrupción desde antes de que el Partido Comunista Chino llegara al poder en 1949.
Las predicciones y proyecciones del calentamiento global sugieren que el actual problema migratorio dejará de ser anecdótico. Unido a los efectos del belicismo en Oriente Medio, del comercio injusto por doquier y del neocolonialismo bajo otras formas en África y otros lugares, el cuadro es inequívoco.
El vector de esta política apunta hacia una división del mundo en dos categorías, dos castas geográfico-sociales, en la que el estrato superior que podría implicar al 20% de la población del planeta podría vivir en un cuadro de relativa distribución, suficiente para generar un consenso y una fuerza militar capaz de mantener al 80% restante en una posición totalmente subyugada y paupérrima. Evocando este escenario, el sociólogo Immanuel Wallerstein observa con razón que, “el orden mundial que Hitler tuvo en mente no era muy diferente”.
Actuar sobre el conjunto
¿Qué vamos a oponer a eso?, ¿el open arms y el elogio infantil del mundo feliz sin fronteras, versión humanitaria de la mundialización neoliberal del capital? Mantenerse en esa posición ha sido, precisamente lo que ha llevado a millones de ciudadanos europeos a emigrar electoralmente a la extrema derecha, desde la izquierda y la socialdemocracia. En Francia y en Alemania (véase la discusión en el último congreso de Die Linke) se comienza a tomar conciencia de algo banal: por supuesto que es inaceptable la política de campos de concentración y el holocausto mediterráneo, pero el problema -no el actual, sino el que nos garantizan las proyecciones futuras y que conduce a esa especie de reedición del mundo hitleriano- es irresoluble sin actuar sobre el conjunto.
Acabar con el orden desorden neoliberal-belicista, dejar de participar en él y romper con las alianzas que lo promocionan, sería el primer artículo del decálogo para cumplir con el mundo.
El antibelicismo habría que conjugarlo con políticas contra el crecimiento crematístico que está en el origen de tales desastres, con el fin de las políticas comerciales basadas en la rapiña y el abuso así como con los regímenes emplazados en el Sur para garantizarlas, con la práctica del multilateralismo en la esfera diplomática, con la denuncia de los acuerdos y relaciones desiguales, con el coto al extractivismo y a la emisión desenfrenada de gases responsables del efecto invernadero, con el respeto y desarrollo de los acuerdos internacionales en la materia, con el cumplimiento del insuficiente compromiso de la ONU de dedicar el 0,7% del PIB a la ayuda al desarrollo, con la prohibición de la venta de armas y la sanción al colonialismo, con la promoción del desarme de los recursos de destrucción masiva comenzando por las cinco potencias nucleares del consejo de seguridad de la ONU, etc., etc.
Solo desde un programa político reformista y humanista que apuntara en esa dirección, podría un estado nacional cerrar sus puertas a los grandes flujos migratorios que están por venir, alegando su compromiso práctico con un mundo viable y la necesidad de preservar su estabilidad interna, sin la cual se pierde toda posibilidad de acción política.
Solo los gobiernos del Norte que cumplan con el mundo podrían cerrar sus puertas al emigrante sin sentir la vergüenza que suscita la presente política hipócrita de la Unión Europea, hablando por un lado de derechos y valores mientras se organizan centros de detención de emigrantes en África y se alimentan las hogueras globales con un modo de vida inviable para todos y sostenido por el militarismo.
La izquierda debería reflexionar sobre cómo abordar esto y dejar de parapetarse en el “open arms” y el “mundo sin fronteras” que nos vendieron los gringos junto con su globalización, un mundo en el que los estados son sustituidos por ONG´s y la política por la manipulable ideología de los derechos humanos.
De la misma forma en que la solución a la desigualdad no es la caridad, sino la nivelación social y una política fiscal acorde, el problema de los emigrantes debe enfocarse en el marco de programas de cambio general. Antes de que la lepenización de Goldman Sachs nos robe todas las banderas.

 

jueves, 5 de julio de 2018

La brunete mediática se dispara ..








El Mundo' y los presos políticos: cuatro frases, cuatro mentiras
 

Antoni Maria Piqué


El Mundo ponía cara de perro de barraca este martes. El traslado de los presos políticos a prisiones catalanas le ha puesto de mal humor y el tabloide nacionalista español ha hecho una portada de gesto torcido, donde lo más difícil es encontrar alguna información: ni uno solo de los cuatro titulares sobre la cosa és cierto. Eso sí, suman al sonsonete que hacen circular PP y Ciudadanos: que Pedro Sánchez paga con ese traslado el voto de los "separatistas", que van a prisiones "de cinco estrellas", que la Generalitat les otorgará beneficios penitenciarios, etcétera.
elmundo mentida retall


Todo está bien calculado para poner a los lectores como una moto. El verbo "ceder" señala a Sánchez como un gobernante débil, vencido, de pacotilla —y no muscular, irreductible y granítico como el anterior, se insinúa, con el apoyo de la frase bajo la cabecera ("Las concesiones de los débiles son las concesiones del miedo"), del político conservador inglés Edmund Burke..
En realidad, Sánchez sólo cumple la ley, como hace el mismo juez Pablo Llarena al firmar las autorizaciones de traslado. Si uno "cede"... ¿el otro también? No tiene ni pies ni cabeza.

La peor trola

El titular sigue diciendo que se entrega "el control de los presos" al "separatismo", en lenguaje cuartelero o de aroma mafioso, como si se tratara de una especie de intercambio de prisioneros por nada. También tiene lo suyo llamar "cabecillas del 1-O" a los presos, con el mismo aire que Roberto Alcázar y Pedrín llamaban "mastuerzo" y "bribón" a los malos de uno de los cómics franquistas por excelencia. También se cuidan de añadir que el traslado se produce "al mes de recibir el apoyo de los independentistas para ser investido". Como queriendo decir que Sánchez vende la patria por el cargo.
Encima, el director general de Prisiones de la Generalitat es independentista y lleva lazo amarillo, avisan en un destacado. Qué extraño, qué horror, qué mal todo: ¡en un Gobierno indepe hay un director general indepe! Y como es indepe, seguro que perpetrará todo tipo de negligencias e infracciones en favor de los presos políticos. Chimpún.
La peor trola de todas, sin embargo, es la última y de más éxito entre la hinchada unionista: que la Generalitat "podrá otorgar beneficios penitenciarios" a los presos políticos. A ver. A los presos preventivos no se les puede aplicar ningún beneficio penitenciario. Es fácil de comprobar: basta buscarlo en Google. Además, lo han recordado este martes la consellera de Justícia, Esther Capella, y los abogados Andreu Van den Eynde (el de Junqueras y Romeva), y Gonzalo Boye (del equipo jurídico de los exiliados).
La Generalitat tiene transferidas las competencias en materia penitenciaria, ha aclarado Boye, pero no puede acordar su excarcelación ni la concesión de beneficios penitenciarios (permisos de salida, por ejemplo), ni la progresión de grado, que no son aplicables a los presos preventivos.

El mundo al revés

Entonces ¿por qué esta serie de mistificaciones? La portada de un diario suele hacerse en una reunión de personas en pleno uso de sus facultades mentales, generalmente sobrias y con títulos universitarios, que deliberan sobre los hechos del día para escoger los más relevantes y explicarlos tal como son. ¿Puede equivocarse tan groseramente un grupo de profesionales tan cualificado o es que tomaron la decisión de equivocarse deliberadamente?
Peor todavía, la portada deja en el aire la duda de si en el diario madrileño entienden el proceso judicial a los "cabecillas del 1-O" y las prisiones preventivas como la aplicación de justicia o como un castigo y/o una revancha, sometidos a decisión política del gobierno español. Quizás porque creen que bse trata de lo último piensan que la Generalitat hará lo mismo, pero al revés.
Al final, esa portada confirma que los "cabecillas" son presos políticos y los mismos que lo niegan son quienes mejor lo argumentan.
A estas alturas, sin embargo, nadie se extraña. Antes de abrir la boca, ya se les han visto los dientes.




 Nota .-

  Lo increíble es que el mismo léxico, las mismas mentiras  que antes dirigían a Podemos  ahora son contra el PSOE... no se molestan ni en crear nuevas.


  

( Está debia ser la portada real )
 Pues sí que ha habido que esperar años para que el 'ABC' hable de "golpistas" en portada, sí...¿Os imagináis al periódico de @abc_es poniendo de portada un montaje fotográfico, y llamando golpistas a partidos escogidos democráticamente y de forma constitucional?


 

Pues no lo imaginéis, lo han hecho de verdad, esta es la verdadera portada del ABC.
 http://cort.as/-7rGJ

martes, 3 de julio de 2018

La era neoliberal explota en una ola neofascista

 
El triunfo de la extrema derecha: la era neoliberal explota en una ola neofascista



La UE ha sido contundente y demoledora contra aquellos gobiernos que han intentado hacer políticas económicas de tipo social y alternativo al neoliberalismo vigente, pero es absolutamente dócil con los discursos racistas y xenófobos de centroeuropa, Europa del este o Italia. La UE no bromea con el neoliberalismo: la economía es algo demasiado importante como para confiársela a los pueblos. En cambio, de la democracia y de los derechos humanos, de ello sí es posible reírse.
De hecho, no ha dudado en chantajear, presionar y amenazar al gobierno de Chipras en Grecia, para que pusiera en marcha medidas de recortes sociales contra el pueblo, para seguir pagando los intereses y la deuda con los banqueros alemanes y franceses. Sin embargo, se muestra completamente débil, complaciente e incluso apoya y secunda las políticas xenófobas de los países europeos gobernados por la extrema derecha. Como denuncia Alberto Garzón, Coordinador de Izquierda Unida, “el acuerdo que ha firmado el Consejo Europeo sobre migración es impropio de supuestas democracias avanzadas, y el mejor posible para la extrema derecha”. Porque, como él dice, es un acuerdo que no compromete a los países más xenófobos y antiinmigración, con el que han salido absolutamente satisfechos.
Mientras anunciaban la noticia de que habían muerto al menos cien personas, entre ellos tres bebés, en el naufragio de una patera, al impedir el ministro de interior ultraderechista de Italia a las ONGs acudir a su rescate, los gobernantes de la UE estaban reunidos para acordar medidas ante la crisis humanitaria de las personas refugiadas. La solución xenófoba promovida por los gobiernos de ultraderecha se ha impuesto: un mayor control de las fronteras, el bloqueo de los migrantes en el Mediterráneo y la creación de centros de detención de migrantes dentro y fuera dela Unión Europea. Es decir, Guantánamos europeos, siguiendo el modelo norteamericano.
Italia y Austria, con gobiernos en coalición con la extrema derecha, junto con el Grupo de Visegrado –Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia–, con gobiernos directamente de extrema derecha, han sido especialmente eficaz forzando la agenda europea hacia posiciones cada vez más xenófobas en la acogida de refugiados e inmigrantes.
En la última década, los totalitarismos de extrema derecha, que habían quedado relegados en Europa a tener una presencia residual tras la Segunda Guerra Mundial, han resurgido de sus cenizas y han regresado, más radicalizados si cabe, convirtiéndose en algunos casos en parte del gobierno en sus respectivos países. De ser excepciones periféricas, han pasado a situarse en la centralidad del tablero europeo. La extrema derecha se está extendiendo por toda la UE como un cáncer.
En Alemania, la ultraderecha de la AfD se dispara hasta el 13% del voto con un discurso contra la política de acogida de refugiados, con tonos claramente racistas, consiguiendo volver a entrar en el Bundestag por primera vez desde el nazismo. Mientras Ángela Merkel endurece la política de inmigración ante las presiones de la CSU, que intenta ganar puntos de cara a las elecciones frente al partido ultraderechista que amenaza con debilitar al CSU con una retórica extremista al estilo Trump. Austria también se sube a la ola de la ultraderecha europea. En Suiza gobierna la extrema derecha, de la mano de la Unión Democrática del Centro (SVP). En Hungría, Víktor Orbán. En Finlandia, Timo Soini se ha convertido en ministro de Exteriores. En Grecia, Amanecer Dorado. En Dinamarca, el gobierno en minoría necesita el apoyo del ultraderechista y anti-inmigrantes Partido Popular Danés (DF) para tomar decisiones. El Partido de la Libertad holandés, considera que sus provocaciones xenófobas le lanzarán al gobierno del país. En Francia la ultraderechista Marine Le Pen, que lidera el Frente Nacional (FN), disputa la presidencia de la nación consiguiendo alcanzar la segunda vuelta en las presidenciales francesas. El belga Vlaams Belang, la italiana Liga Norte, el británico Ukip o el finlandés Partido Finns avanzan posiciones y cada vez se vuelven más radicales y agresivos en sus discursos y sus prácticas atizando el odio contra el extranjero.
¿Qué está ocurriendo en el mundo? Mientras que en 2000 la UE imponía sanciones a la Austria de Jorg Haider, en 2018 ésta va a asumir la presidencia europea con Sebastian Kurz. Tras la devastadora Segunda Guerra Mundial impulsada por los regímenes fascistas, se llegó al acuerdo de que la democracia liberal era la menos mala de las alternativas posibles. Pero ahora, la extrema derecha se está nutriendo de la dramática situación de los refugiados, la mayor crisis migratoria en Europa desde 1945. Los xenófobos están alentando la exacerbación de la simbología emocional de la patria y la soberanía nacional para enfrentarse a una supuesta invasión extranjera, frente a lo que fue un proyecto comunitario de la Europa de los pueblos y la solidaridad. De esta forma la noción de que Europa está siendo “invadida por musulmanes y terroristas” ha ganado una considerable fuerza en la última década y los partidos de extrema derecha cada vez más despliegan esta retórica para presentar al islam y los extranjeros como una amenaza a la supuesta “unidad nacional y cultural” de los países y del continente.
Es más sorprendente que esta xenofobia cale en la población europea cuando la cantidad de refugiados llamando a las puertas de la UE es hoy exponencialmente menor que hace tres años. Incluso entonces, cabía preguntarse por qué la entrada de un millón o dos de personas a una comunidad de 510 millones era y es presentada como una “crisis”.
Con todo, la presión actual de la extrema derecha en Europa ha hecho cambiar los términos del debate. Hace unas semanas, el gobierno español sacaba pecho ante su decisión de acoger al Aquarius frente la política fascista de políticos como Salvini. Pero hoy Merkel y Macron, con Sánchez aspiran, no a reformular el conjunto de las políticas de acogida de la Unión, sino a crear “centros cerrados” para inmigrantes en los puertos de llegada de Europa, una iniciativa idéntica a la de los centros de internamiento de extranjeros (CIEs) que han sido duramente criticados por organizaciones de derechos humanos y que son los “guantánamos” tan denunciados.
Lo cierto es que la era neoliberal está culminando en Europa y Estados Unidos con una explosión neofascista, que ha integrado a la primera, en donde una xenofobia política y social está ahogando aún más la agenda de la UE, que ha pasado de ser la Europa de los mercaderes a la Europa del racismo genocida. Esta es la realidad de la Fortaleza Europa: autoridades tan ciegas por su obsesión con el asunto de la inmigración que han perdido la capacidad de reconocer la más básica de las obligaciones hacia otros seres humanos.
Debemos reclamar una movilización que denuncie la responsabilidad del neoliberalismo respecto del auge de este neofascismo. Exigir y obligar a cumplir a nuestros dirigentes con los principios de respeto y garantía de derechos humanos. No es una opción. Es lo que nos permite sentirnos parte de una civilización o engrosar las filas de la barbarie. Hemos de convertir Europa en lo que dice ser: una unión social y política que respeta los derechos humanos, prohíbe las expulsiones colectivas e impide la extradición de personas a estados donde puedan sufrir muerte, tortura o tratos inhumanos o degradantes.
Enrique Javier Díez Gutiérrez. Profesor de la Facultad de Educación de la Universidad de León.

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https://ombelico.com.ar/2018/06/25/el-corazon-xenofobo-del-norte-del-mundo/

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Nota.- 

Lo increíble de todo ello, es que en parte  el NORTE lo ha provocado con  las intervenciones y  no han hecho ni la mínima autocrítica…no están acostumbrados a ella …véase el caso más fragante  , Libia , tampoco todos los refugiados y emigrantes , son musulmanes , sino de ex colonias  europeas  , pero por ejemplo Inglaterra se  ha blindado  de responsabilidades  con el Brexit , ni tampoco son capaces de autocriticarse  por  la entrada  de los  países del Este sin referéndums  y que han salido rana en todo ello , y pero aun  , lo de Libia , se  reproduce a su modo en Ucrania . No hay por dónde cogerlo, ni que lo hicieran a propósito  saldría peor.