viernes, 30 de abril de 2021

Gentrificación y biopoder .

                                           


Necropolitización 


Juan Montaño Escolar

  La gentrificación lleva en su código de exclusión, con o sin disimulo, la necropolitización, en las ciudades americanas, de quienes están en el mapa objetivo de la centralidad.

Then you know how I feel walk

 a mile in my shoes. Before you judge this man

 If you walk in my shoes you might understand.

Walk A Mile In My Shoes.

-Joe South[1].

Hace falta el axê

            Al atardecer de nuestras vidas empezamos a ser nuestras memorias de triunfos y derrotas, de resistencias y renunciamientos, de cimarronismos y acciones esquivas. Nos alcanzan por fin las consejas maternales y los regaños paternales, nos sorprende esa revenida paciencia infinita y queda el regusto de algún desafío cumplido al momento de la desconfianza familiar. Una palabra de abuelas, más de ellas sin dudas, que heredaron a nuestras madres: “¡dame un respiro!” Tres palabras que tienen extensión histórica desde el mismo punto de salida, justo ahí, cuando comenzó esta desventura humana, hace siglos, a este ahora pleno y con tantas geo referencias. Este axê de súplicas desesperadas, de simple pedido de tregua a una cotidianidad bravísima y difícil o de exigencia al límite de la rebeldía contra esa suma tenaz de injusticias. También podría ser un reclamo de paz o un breve instante para desaprender (y reaprender); quizás debió ser el punto insurgente para no renunciar a unas sobrecargas aceptables bajo la pesada responsabilidad de la tradición familiar (“ser mejores que los padres”); o por qué no la apenas domesticada impaciencia para  emanciparse de esa bifurcación de opresiones. ¿Qué oprimido, mujer u hombre, no ha gritado su rabia por un respiro puntual y necesario? No es solo aire físico, más bien son los componentes metafóricos de la verdad que tienen sus asfixiantes momentos aunque, en esos minutos, no haya una rodilla en la nuca. No la hay, pero el racismo es el peso ideológico de las opresiones.

La justicia y sus distancias primermundistas

            Del lunes 25 de mayo del 2020 a este martes 20 de abril del 2021, allá se dictó un veredicto de culpabilidad para el asesino de George Floyd. Allá, en Minneapolis, estado de Minnesota. Demasiado lejos para los jóvenes negros de las ciudades brasileñas, colombianas y ecuatorianas. El vídeo de su sacrificio fue para la indignación universal, pero la duda en forma pregunta no entusiasma ganas triunfalistas: “¿Cuántos otros crímenes (contra personas negras) no fueron grabados?” Allá y acá. O si fueron grabados, como el asesinato de Andrés Padilla, en Mascarilla, provincia de Imbabura, Ecuador, pero el policía recibió respaldo ministerial para la impunidad; sin hablar del llamado espíritu de cuerpo policial. O sea complicidad criminal institucional, para ir directo al tema. Las policías americanas del norte, centro y sur, son eso, el brazo duro del racismo. Exacto y sin remilgos. ¿Hay excepciones o solo son matices de perversidad? Una pregunta meridiana de norte a sur. Y es plaga uniformada que no deja en paz a los jóvenes negros. No hay datos estadísticos en el Ecuador, pero ¿cuántos jóvenes han sido asesinados? ¿Cuántos están postrados para siempre por disparos policiales? ¿Cuántos son encarcelados porque se los declara abusivamente sospechosos? No, no hay respiro. No dan una caridad de aire. Todavía están pendientes rebeldías públicas.

No solo es el lenguaje de periódico burgués, pero también es esa sociología reaccionaria y que funciona como sentencia inapelable para quienes están en aquella territorialidad urbana. Nuestras barriadas soportan esa sociología del biopoder. Achille Mbembe la pinta perfecta: “En la formulación de Foucault[2], el biopoder parece funcionar segregando a las personas que deben morir de aquellas que deben vivir”[3]. Es la biología política del ninguneo extremo productor de esa narrativa que comienza por la clasificación definitiva: son lugares de marginales. O más amplio para precisar el desprecio: la marginalidad urbana. Ahí con esa palabra se configura cierta apretada definición política y el significado cultural para establecer fronteras físicas y sociales dentro de las ciudades. Es la marginalidad que se aproxima al delito, porque está allá o viene de allá. Solo porque está allá un lugar que descifra describiendo vidas diferenciadas por la georeferenciación social, y es la matriz “peligrosa” para estas vidas necesarias de la centralidad. De esas sociologías del riesgo social a los manuales de operaciones policiales. Y lo que viene es el retrato pérfido de la raza de jóvenes de la marginalidad.

Fuentes: Rebelión - Imagen: protesta de Black Lives Matter, Nueva York, July 10, 2016. Benedict Evans/Redux

La piel es la insignia del descrédito

            En las ciudades de las Américas, las personas negras no traemos escrito el ‘santo y seña’ de la marginalidad, salvo la piel como insignia, mas es suficiente para conformar la mentalidad policial de los grupos sociales de la centralidad. Más frecuente o más disimulado, pero muchos afroamericanos hemos soportado la vigilancia descarada o disimulada de los guardias de los supermercados sin importar que están las cámaras de televisión. La vigilancia sobre el peligro racializado es el programa hostil anterior al ejercicio de la necropolítica.


La marginalidad se acarrea con la perpetuación del racismo en los países americanos y la creación de fronteras que no deberían cruzar ‘esa otra’ ciudadanía, porque hasta ahí tienen los marginales ‘su’ derecho y de ahí hasta no se sabe dónde está el derecho de la “buena gente”, aunque es un arcaísmo está en el habla usual del distanciamiento social pre-pandemia. La acción-frontera la lleva consigo el habitante de la centralidad y es asumida por los organismos de los Estados como defensa de la ley. Lean bien, por favor, la ley es el muro invisible para la jerarquía separativa entre los que pueden recibir un balazo policial por nada y quienes hasta se mofan impunemente de los policías. Así es, ese Estado, esa cosa es más difusa más allá de frontera de la marginalidad. “Pero la principal función que cumplen las fronteras urbanas en el Tercer Mundo es la de vertederos humanos[4]. En algunos casos, la basura urbana y los emigrantes no deseados acaban juntos en infames vertederos…”[5] Esos límites diseñados por el biopoder asfixian, por malos olores, imagen deprimente y brutal control estatal.

Bad news is coming

            Si había que personificar un villano racista policial se lo encontró en Derek Chauvin, porque es de allá del imperio, que se presume moralmente ejemplar, porque es  potencia comunicacional, por la prolongada brutalidad de ese acto policial, por su atrevida osadía que despreció súplicas e ignoró la evidencia testimonial de las cámaras de los teléfonos. Pero fue más la inicial valentía de Darnella Frazier[6]. Y porque en todas las ciudades del planeta el Black Lives Matter fue mucho más que la combativa etiqueta de nuestras hermanas Alicia, Patrisse y Opal, la gente de barrio adentro recordó, con la nitidez de quienes perdieron las escamas alienantes, que eran la raza de la marginalidad. La negritud sin fronteras o rompiéndolas ahí donde fueron colocadas. Y comprende, sin abundantes aguajes teóricos, que el racismo es la razón ejecutora de acciones de los Estados (ya paleo-clásicos en su mono-culturalidad y uninacionalidad), por ejemplo, desde el impulso de la gentrificación hasta la supresión del aire de las personas negras. O ennegrecidas. Racializadas, por favor. Bad news is coming dice el blues de Luther Allison, pero no son solo de estos meses. ¡Qué nadie se confunda!

            Michel Foucault se preguntaba: “pero, ¿qué es propiamente el racismo?”[7] Y él se respondía así: “En breve: el racismo es un modo de establecer una censura en un ámbito que se presenta como un ámbito biológico”. Un sinónimo de ‘censura’ es examen. Examinar la importancia de las vidas desde la jerarquía racial. ¿Quiénes asumen el derecho de ‘dejar vivir’ o ‘no dejar vivir’ a las personas de la marginalidad? ¿Quiénes asumen la legalidad absoluta de calificar a unas vidas ‘marginales’ proclives a la represión mortal? Las respuestas como malas noticias no es que recién estén llegando, porque ya están aquí, en las ciudades americanas del norte y del sur. En Brasil, Colombia o Ecuador. ¿Nombres? Wellington Copido Benfati, Emily Victoria, Rebeca Beatriz Rodrigues, Marielle Franco (Brasil). Anderson Arboleda, Juan Pablo Marín Pérez, Nicolás Suárez Valencia, Sara María Rodríguez García (Colombia). Andrés Padilla, Maribel Pinto (Ecuador). Unos pocos nombres, pero son miles. Nuestros jóvenes jamás tienen buena prensa (lo que sea que en entienda por aquello), no siempre hay heroínas con celular para filmar asesinatos, pero sí los Estados a necropolitizar[8] “aquellas vidas que siempre nos harán falta”, parafraseando al Poeta Antonio Preciado.

¿Véndele a la mente y jamás a la gente?

            La gentrificación lleva en su código de exclusión, con o sin disimulo, la necropolitización, en las ciudades americanas, de quienes están en el mapa objetivo de la centralidad. La marginalidad es discurso deleznable de la clase política convencional, llámese izquierda o derecha, a veces tienen sus coincidencias en la territorialidad slum. Y hasta copian el lenguaje militarista de esas bocas de oficinas de seguridad. Objetivo militar de esta guerra que se inventó para “acabar con indeseables” y de al mismo tiempo maldecir a los “derechos humanos”. La gentrificación contamina con su código de exclusividad social y hasta quienes deberían preocuparse repiten esas necropolitizaciones con el idioma cobarde de las justificaciones. En estas circunstancias es certeza trágica aquel título: “véndele a la mente y no a la gente”[9]. La gentrificación es confrontación social, abierta o disimulada, y tiene como alma persistente el racismo, no siempre para sustituir el conflicto de clases sociales sino para otorgarle facultad de razonar sus acciones y color ideológico a la piel de la marginalidad. Quizás todavía sea ese racismo del linaje o de la sangre, las dudas están al menudeo, pero es racismo objetivado para la acumulación de privilegios a favor de cierto color de piel sacralizado. 

            Ocurrió en Guayaquil el año pasado con la Covid-19, por marzo y abril y antes fue en las acciones populares de octubre de 2019. No son solo confusos actos policiales directos y fatales, más bien está en la pregunta de A. Mbembe: “¿en qué condiciones concretas se ejerce ese poder de matar, de dejar vivir o de exponer a la muerte?”[10] Es un concepto ontológico pervertido por los Estados americanos, desde las perspectivas de los grupos de la blanquitud dominante. Veamos: estos grupos nos racializan para necropolitizar nuestras humanidades y volver imperecedero su biopoder. Gentrificación no solo es el cambio físico urbano para la plusvalía material y la depreciación de humanidades, ese es el impacto más visible y es motivo de conversación aséptica, es, mejor dicho, la racionalidad perspicaz sobre la raza en relación con la “economía del biopoder… para regular la distribución de la muerte y en hacer posibles las funciones mortíferas del Estado”[11].

            A Derek Chauvin lo alcanzó el veredicto de ‘culpable’. ¿Es el comienzo de algo allá en las ciudades estadounidenses? Aunque todavía quedan dudas pudriéndose por muchas y continuas decepciones. ¿Y por acá qué? El derecho inalienable de los jóvenes negros a respirar sin restricción policial abusiva, en las calles de nuestras ciudades, todavía está por aplicarse. Es solo un deseo. El axê de nuestros Ancestros vuelve a nuestras agendas de cimarronismo político.

Notas:


[1] Camina una milla en mis zapatos, autor de la letra Joe South, para este epígrafe se utilizó la versión cantada por Adam Wilson Blount, mejor conocido como Big Daddy Wilson.

[2] Paul Michel Foucault (1926-1984). Biopoder concepto del filósofo francés, que hace referencia a las políticas de los Estados actuales que consideran técnicas de subyugación de  los cuerpos y control a cierta parte de la población cuyas vidas son desvalorizadas hasta la muerte.

[3] Necropolítica, Achille Mbembe, España, Editorial Melusina, S, L, 2011, p. 21.

[4] Las cursivas son de JME.

[5] Planetas de ciudades miseria, Mike Davis, Madrid-España, Ediciones Akal, S. A., 2007, 2014, pp. 65-66.

[6][6] Adolescente afroamericana, de 17 años, que filmó el criminal abuso policial, aquel 25 de mayo de 2020. El 25 de mayo de 2020, Darnella llegó a la tienda de conveniencia Cup Foods con su prima de 9 años. Habían ido a comprar unos snacks y se encontraron con una escena estremecedora. Ella no dudó en sacar su celular y divulgar el abuso policial. El video captado por Frazier (quien tenía 17 en ese momento) muestra a Chauvin aplicando presión con su rodilla en el cuello de Floyd, un hombre afroamericano de 46 años. La imagen se viralizó y generó conmoción en Estados Unidos y en el mundo, lo que desató multitudinarias protestas contra el racismo y la brutalidad policial (tomado de Infobae, del 21 de abril de 2021).

[7] Genealogía del racismo, Michel Foucault, La Plata-Argentina, Editorial Altamira, p. 206.

[8] Referencia a necropolítica de Achille Mbembe.

[9] Título de un libro de Jürgen Klaric, según la solapa: “enfocado a las ventas, uno a uno, de productos y servicios”.

[10] A. Mbembe, Óp. Cit., p. 20.

[11] A. Mbembe, Óp. Cit., p. 23.

https://rebelion.org/necropolitizacion/

jueves, 29 de abril de 2021

Democracia o barbarie .


                                                                                                                


 ( La asociación FACUA-Consumidores en acción y el ministerio de Consumo han denunciado ante la Fiscalía la venta en línea de camisetas con la imagen ensangrentada del ex vicepresidente del Gobierno ) . 

Amenazas, insultos y coacciones también en el Congreso: “Nunca había tenido problemas y ahora tengo que ir con seguridad”

 José Enrique Monrosi

 Compartir la última amenaza recibida se ha convertido en tema de conversación recurrente entre diputados. Representantes de casi todas las fuerzas parlamentarias lo admiten: las intimidaciones, los insultos y las coacciones de todo tipo son algo cada vez más habitual. Y va a peor: “Se está extendiendo peligrosamente, hace un año yo no recibía mensajes tan virulentos como los que recibo hoy”, explica el portavoz de Compromís, Joan Baldoví.

Hay casos extremadamente graves, como la amenaza de muerte recibida por Gabriel Rufián en la que se mencionaba explícitamente a su hijo: “Me llegó el mensaje por redes sociales una noche a las tres de la mañana. Era de un tipo que me venía acosando desde hace tiempo. Lo denuncié y acabó en nada”.

Una tarde, los diputados del grupo parlamentario de Bildu esperaban junto a un paso de peatones para cruzar un semáforo. Un hombre se les acercó y, sin levantar mucho la voz, les dijo: “Qué fácil sería ahora meteros un tiro en la cabeza”. El parlamentario Jon Iñarritu recuerda el episodio: “Nos quedamos perplejos, no supimos ni cómo reaccionar”.

Las amenazas van a más

Las últimas amenazas de muerte explícitas a varios miembros del Gobierno y a Pablo Iglesias, han elevado sin duda el nivel de violencia. La pregunta es si se pueden considerar una advertencia de que a partir de ahora vayan peligrosamente a más. Responde un diputado del Congreso que prefiere no ser citado: “Estamos preocupados porque es evidente que todo este ambiente de violencia verbal influye y mucho. Yo nunca había tenido problemas y ahora tengo que ir con seguridad. Lo que está pasando con las últimas amenazas con balas y navajas no es para tomárselo a la ligera”.

Un diputado consultado por Infolibre recuerda haber visto “correr literalmente” a un compañero de escaño ante un intento de agresión en pleno centro de Madrid. Otra diputada admite haber tenido que abandonar con sus hijas el lugar en el que estaban comiendo “ante el acoso y los insultos” de un grupo de comensales. Y piden no ser citados porque “la cosa está muy mal”.

El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, reconoce esa preocupación y mira de reojo a las elecciones madrileñas: “Claro que nos preocupa. Esta espiral suele acabar o con una desgracia, que ojalá que no pase, o derrotándolos en las urnas. Y para derrotarlos en las urnas las izquierdas tenemos que solucionar los problemas a la gente”.

El discurso de la extrema derecha

Pero ¿quién está detrás de este acoso? Baldoví recuerda que muchos de estos episodios están inspirados en el discurso del odio de la extrema derecha. “Nosotros lo hemos vivido en nuestras carnes. La última vez que celebramos el día del País Valencià nos lo reventó un grupo fascista que montó una batalla campal agrediendo a asistentes y a periodistas. Denunciamos e identificamos a varias personas, pero todo quedó en nada”.

Varios portavoces consultados coinciden en señalar también a la extrema derecha como responsable última de un “irrespirable clima político” y de una “agresividad verbal que acaba siendo la semilla que legitima lo que viene después”. Desde el Grupo Popular en el Congreso recuerdan, sin embargo, que “las amenazas no son nuevas, en otras legislaturas también se han recibido”, y por tanto no encuentran correlación entre un aumento de casos y la entrada de la ultraderecha en las instituciones.

En el PSOE tienen claro que hay un punto de inflexión en toda esta escalada de agresiones verbales: la moción de censura que Pedro Sánchez acabó ganándole a Mariano Rajoy. Desde ese momento, y agravado con la investidura posterior que dio paso al Gobierno de coalición con Podemos, los diputados socialistas han denunciado “auténticas campañas de acoso personales” a sus correos electrónicos, agravadas muchas veces en el caso de las mujeres con insultos machistas. Los socialistas prefieren no hacer públicos contenidos explícitos de amenazas recibidas, pero reconocen que “se amontonan los mails” con acusaciones parecidas a la que apareció pintada en la casa familiar de Tomás Guitarte, diputado de Teruel Existe, la noche antes de que tuviera que votar en la sesión de investidura: “Guitarte traidor”, rezaba.

El portavoz del PNV, Aitor Esteban, también admite haber recibido insultos y amenazas en otras legislaturas, aunque le llama la atención un episodio vivido recientemente en la calle: “Hace unos días se me acercó un grupo de jóvenes y me gritaron ‘¡Arriba España!’ Hasta ahora lo habitual era que dijeran ‘Viva España’, sin más”. La connotación, que no es poca cosa, le inquietó.

https://www.infolibre.es/noticias/politica/2021/04/28/amenazas_insultos_coacciones_tambien_congreso_nunca_habia_tenido_problemas_ahora_tengo_que_con_s

miércoles, 28 de abril de 2021

Democracia contra fascismo .

 La banalidad  del mal

LDM

 El escritor Alba  Rico .. escribió dos artículos recientes  uno en CTXT (1) y luego en Diario.es    Jorge Urdánoz  otro muy similar  (2) . en el primero La barca  de Descartes  viene a decir algo que lo une a este entre otras cosas  y es que digamos la  frase , “ democracia contra fascismo”  es un error ..Alba dice: el rótulo “fascismo”, en el que no se reconoce la mayoría de los VOTANTES  de Vox ni del PP, es precisamente el que Vox y el PP quieren que utilicemos contra ellos” . Y añade ..”Que Savater, hombre inteligente y gran escritor, razonable en otros períodos de su vida y que cree estar defendiendo la democracia, defienda el voto “anti-pático” de Ayuso;” .. y así se divide el debate entre  demócratas y fascistas y no entre izquierda y derecha .  Y al final a Vox  dice   que es fundamentalmente  nacionalista  y no es  fascista sino derecha radical . Pero obvia  hechos y cosas  fundamentales ,.Primero que el fascismo es un proceso de  nacionalización de las masas como bien estudio Mosse  y el fascismo es un proceso de fastización . Mussolini  no lo era hasta el 1919  como bien estudio Gentile , solo cuando une  los arditi y los fassio  y otros patriotas del victoria mutilada  lo es . Pero se inspiró en la derecha revolucionaria francesa de la III  República, empezando por   Barres nacionalista revolucionario como bien analizó Sternhell   y digo revolucionario . Pero en Francia termino en el  Vichismo patria  familia y religión una reacción conservadora.. por otro lado la violencia  puede ser bien simbólica y  por lo tanto autoritaria . Y la personalidad autoritaria de los  fascismos  fue analizada por Adorno . ¿ Y estos componentes  simbólicos   darvinistas sociales xenófobos y  racistas , machistas  antifeministas y anti liberales  …son demócratas? . Y como si no fuera violencia simbólica el acoso  o el maltrato de palabra . ¿ Y  el acoso  judicial ?

 Claro que no es naturaleza  es cultura . Y empieza por una guerra cultural  que  da  la derecha radical .Pero además los fascismo latinos en áreas católicas  son bien variados de Vichi a Salazar  y no solo el Mussoliniano  que al principio tampoco  tenía el componente racista ni  antisemita ..  Para Ayuso eso  si estaban del  lado bueno de la historia. Lo de  democracia contra fascismo es una estrategia de la izquierda más allá  de las elecciones madrileñas sino de las generales cuando  pacte Ayuso con Vox , Si lo logra. El estratega en la sombra de radicalización de la derecha  es  Aznar  FAES  para unirla ( Falange Española ) un ex falangista en los años 70 como  Ayuso, también lo era . Y es.

Rico y Urdanoz se equivocan . El fascismo -modelo italiano  copiado en España no fue  votado , ni popular , ni en el 36 , el fascismo en España  fue militar y católico   o sea  fue   INSTITUCIONAL  monarquía militares e Iglesia  poderes fácticos= franquismo y triunfo porque gano  una guerra civil , en una democracia aislada  y apoyado en el exterior  masivamente por los fascismos  Italia  , Alemania y Portugal . la derecha española es bien heredera de eso desde  Fraga a Aznar y no es la europea antifascista y mal va aislar al fascismo efectivamente Casado- Ayuso -Abascal   no es ni Merkel ni  Macron  y menos siendo iliberales ..Ya lo dijo Ayuso "  "Si te llaman fascista estás en el lado bueno de la historia"  " le faltó decir  de la de AQUÍ... ¿Y acaso la monarquía actual condeno alguna vez el Franquismo ? ¿ Y  no fue bien golpista en el 1936 ?(3)

Nota (1) https://ctxt.es/es/20210401/Firmas/35780/elecciones-madrid-ultraderecha-santiago-alba-rico.htm

Nota  (2) https://www.eldiario.es/opinion/zona-critica/naturaleza-vox_129_7875959.html

Nota (3) https://www.elsaltodiario.com/historia/mussolini-y-los-monarquicos-conspiraron-para-acabar-con-la-republica

domingo, 25 de abril de 2021

Francia .- Las trampas del identitismo.

 Francia: Más allá de las polémicas respecto al “islamo-izquierdismo”, las trampas del identitismo

Christian Picquet  

 En estos tiempo de confusión extrema, necesitábamos que una nueva eminencia macroniana viniese aún más a descomponer el clima francés. La señora Vidal, ministra de enseñanza superior y de investigación ha querido claramente tener su cuarto de hora de notoriedad explicando, en Cnews, que el “islamo-izquierdismo” gangrenaba la universidad hace tiempo; que un número preocupante de investigadores y enseñantes confundían conscientemente su trabajo de investigación científica orientada desde el principio, con una acción de propaganda, y que convenía encargar al CNRS la tarea de descubrir tales supuestas derivas. Con ello se desencadenó inmediatamente una polémica que infectada por los acontecimientos como el de la denuncia pública de algunos enseñantes en la facultad de Ciencias políticas de Grenoble, no cesó de agrandarse a partir de entonces. Detractores del “islamo-izquierdismo” y defensores de la “islamofobia” pudieron hablar sin rebozo ante las cámaras, y la gran perdedora de esta pretendida querella intelectual ha sido...una izquierda atrapada en sus silencios y sus divisiones, hundiéndose más cada día en su desorientación. La alegría malvada de los turiferarios de la política del Príncipe dice claramente quien se lucra de este enésimo crimen contra el pensamiento crítico; un David Revault d’Allonnes señala por ejemplo, con el mayor cinismo, que “es hoy la principal línea de ruptura en el seno de la izquierda. Mucho más polarizada que respecto a la economía de mercado” (Le Jornal du dimanche, 21 febrero 2021)

Y sigue…   

  https://www.sinpermiso.info/textos/francia-mas-alla-de-las-polemicas-respecto-al-islamo-izquierdismo-las-trampas-del-identitismo

sábado, 24 de abril de 2021

Fernando Savater y su camino a Siracusa .

 

                                                     


  
Fernando Savater sorprende en 'El País' y confiesa a quién votará el 4M .

El filósofo reconoce que ya tiene decidido su voto

 El filósofo español Fernando Savater ha sorprendido este sábado en El País a propios y a extraños tras haber revelado en una columna a quién votará el próximo 4 de mayo en las elecciones de la Comunidad de Madrid.

En el artículo titulado Convencido, Savater reconoce quien es su candidato preferido: "Nunca he votado al PP y me cuesta, pero esta vez será a Díaz Ayuso".

Así explica el intelectual su decisión: "Hablando de Tom Paine, dijo Bertrand Russel que sus enemigos le odiaron por sus virtudes, no por sus defectos. Creo que lo mismo ocurre con Isabel Díaz Ayuso. Recordemos el escándalo causado por los tanteos con la vacuna rusa hasta que por fin nos enteramos de que no era mala idea. (?) Le reprochan con retorcida indignación lo que ha hecho -traer aviones con material sanitario, el hospital de Ifema y el Zendal- porque no es fácil acusarla de cruzarse de brazos, como tantos otros". (?)

Según él, "de crear polarización acusan a Ayuso los mismos que apoyan como 'progresista' un gobierno sostenido por separatistas y bolivarianos de guardarropia cuya ideología consiste en proclamar que la derecha nunca pasará".  

Además, alerta sobre el comunismo y lo que representa Pablo Iglesias en los comicios madrileños: "Sin suponer que vayan a traer gulags ni Paracuellos, reviven los peores remedios para los males del presente. No olvidemos que esa ideología ha causado crímenes, pero sobre todo es una mala idea. Si lo contrario a ese comunismo intervencionista, que enfrenta lo público con lo privado y manipula identidiades, no es la libertad, se le parece mucho".(1)

Cabe destacar que Savater formó parte de las listas de Albert Rivera en las elecciones de 2019 y anteriormente fue simpatizante de UPyD y en el artículo alaba a las figuras de Ángel Gabilondo y Edmundo Bal: "Aunque a los comicios madrileños se presenta gente estimable como Edmundo Bal y Ángel Gabilondo, qué buen vasallo si tuviese mejor señor, no despiertan la animadversión de gente tan significativa como ella, cuyos enemigos la honran".

https://www.elplural.com/politica/fernando-savater-sorprende-pais-confiesa-votara-4m_264896102

Nota del blog  (1).-  Desde ser  un libertario anarquista a terminar  votando a un PP aliado a Vox ,o sea franquista , no veas el camino a Siracusa  que  realizó, además con un montón de falacias como justificación. En apoyo del  lema trumpista de  Ayuso socialismo o libertad , luego transformado en comunismo  o libertad . El lema es una completa falacia en sí mismo, en dos sentidos. El primero es que realmente no existe ninguna formación política, de todas las que se van a presentar a dichos comicios, que presente un plan de Gobierno auténticamente socialista, no digamos ya comunista . Ni el PSOE (que dejó de ser socialdemócrata  desde la década de los 70 del siglo pasado) ni por supuesto Podemos (o las otras formaciones surgidas a su sombra) poseen idearios verdaderamente socialistas o comunistas, aunque algunos de sus líderes, candidatos, dirigentes o militantes puedan provenir de formaciones políticas más a la izquierda. Pero en lo concreto, en las medidas concretas que se vierten en sus programas electorales (por lo menos en lo que hemos conocido hasta la fecha), sus propuestas son meras fórmulas cosméticas y suavizadas de lo que podría (y debería) ser un plan de Gobierno socialista .Ni siquiera una nueva Banca   pública .  Ver a Savater convertido al trumpismo nacional madrileñista es bien elocuente con  su concepto de “libertad”   absolutamente manipulado. La libertad entendida como el tener y no como el ser .Menuda identidad.  Y al igual lo que saca de la vacuna rusa  aun no homologada  en   aquel momento en la UE . Y sin dosis aun suficientes  para suministrar . 

 Y ya entras ganas de  gritar , No solo , ¡"democracia o fascismo"¡, sino ¡ "libertad  o barbarie"! .

Nada raro en ese medio que hace días en  una editorial defendía  a Vox  , con falacias y    sustraendo información sobre el mitin de Vox en Vallecas. O el mismo Vargas  Llosa apoyando a la  Fujimori en  Perú. .Ver el articulo de Savater en el País .. 

 https://elpais.com/opinion/2021-04-24/convencido.html

viernes, 23 de abril de 2021

Sobre el concepto de historia de Walter Benjamin

  

                                                             




Walter Benjamin .- Sobre el concepto de historia (1940)

Se ha dicho que “Benjamin se ha escondido en sus obras” y él mismo afirmó, en conversación con André Gide, que “sólo la muerte hará que de la obra salga la figura del autor. Entonces ya no se podrá desconocer la unidad de sus escritos”. Y, en efecto, sus relampagueantes y herméticas consideraciones contenidas en las tesis Sobre el concepto de historia (1940), su última obra, representan un ejemplo del sentido profundo y subterráneo de la corriente que inspiró todo su angustioso y dramático devenir intelectual.


https://conversacionsobrehistoria.info/2018/09/23/walter-benjamin-sobre-el-concepto-de-historia-1940/






jueves, 22 de abril de 2021

A Vargas Llosa le devoran sus demonios

 El apoyo de Vargas Llosa a Keiko Fujimori: la decadente reconversión en aras de una obsesión ideológica

Cecilia González

 Al escritor Mario Vargas Llosa le ganaron sus demonios. Al final, su obsesión contra la izquierda pudo más. Tanto, que el fin de semana convocó a votar por Keiko Fujimori en la segunda vuelta de los comicios presidenciales de Perú que se realizarán el próximo 6 de junio.

El posicionamiento que el Nobel plasmó en una columna desató un revuelo. Y cómo no. Si puso fin a tres décadas de un abierto enfrentamiento iniciado en 1990, cuando Vargas Llosa perdió las elecciones contra Alberto Fujimori. Desde entonces, sus críticas al expresidente y a su hija fueron implacables. Siempre los equiparó, con razón, a una dictadura, a violaciones a derechos humanos y a la corrupción.

Hasta ahora que, como él mismo escribió, decidió que Fujimori es "el mal menor" porque enfrente se encuentra Pedro Castillo, un maestro y líder sindical que se autodefine como político de "izquierda marxista" y que sorprendió al ganar la primera vuelta del 11 de abril.

Ese fue el límite para Vargas Llosa, quien desde su Fundación Libertad encabeza una cruzada contra los llamados populismos de izquierda, hace contorsiones declarativas para evitar críticas a los populismos de derecha y denuesta a todo político que no adhiera a los postulados liberales. Por eso no le importó entrar en abierta contradicción con las convicciones que había defendido con vehemencia durante tantos años.  

"Yo por Keiko Fujimori no voy a votar nunca", prometió en 2011, cuando la hija del expresidente se postuló por primera vez. "Sería deshonroso que los peruanos reivindicaran una de las dictaduras más atroces que hemos tenido", advirtió al recordar el brutal legado que dejó Fujimori. El regreso del fujimorismo, afirmó, restablecería a la dictadura, le daría el poder a un gobierno fascista y "sería la más grave equivocación que podría cometer el pueblo peruano".

Las descalificaciones se sucedieron en los años siguientes. "Si gana (Fujimori), una de las consecuencias tristes de estas elecciones sería que se abrirían las cárceles. Los ladrones, los asesinos saldrían de los calabozos al poder, algo que sería muy triste", dijo Vargas Llosa en 2016 mientras la heredera protagonizaba su segunda candidatura presidencial.

Unidos por el espanto a la izquierda, Vargas Llosa y Fujimori forjaron la alianza más inesperada con base en especulaciones, prejuicios, falacias y lugares comunes que envuelven desde hace tiempo a la política latinoamericana: del "miedo al comunismo" al "no queremos ser Venezuela".

Si ella triunfara, añadió, "sería una reivindicación de una de las peores dictaduras que ha tenido el Perú, una de las más sanguinarias, una de las más corruptas. Votar por la hija del dictador, que lo primero que va a hacer es abrir las cárceles sacar a todos los fujimoristas, empezando por su padre, para que pasen a gobernar, sería una gran desgracia para el país".

Keiko Fujimori jamás se quedó callada. Dijo que Vargas Llosa era "un turista que habla por la herida", es decir, por el rencor que arrastraba desde su derrota en 1990; que lo que le sobraba en imaginación le faltaba en caridad humana; que sus "acostumbradas pataletas en política" lo seguían traicionando y que no conocía la realidad del pueblo peruano.

Pero el intercambio de acusaciones quedó atrás. Unidos por el espanto a la izquierda, Vargas Llosa y Fujimori forjaron la alianza más inesperada con base en especulaciones, prejuicios, falacias y lugares comunes que envuelven desde hace tiempo a la política latinoamericana: del "miedo al comunismo" al "no queremos ser Venezuela".

Para justificar su apoyo a la candidata, el escritor aseguró que un eventual gobierno de Castillo tendrá "todas las características de una sociedad comunista", como si eso hoy fuera posible, y que el maestro gobernará como Nicolás Maduro, el malo favorito de la región. O incluso peor: "Significará probablemente un golpe de Estado militar a corto plazo en el Perú". Qué susto. La campaña del miedo en todo su esplendor.

 En cambio, dice Vargas Llosa, con Fujimori en la presidencia hay más probabilidades de salvar la democracia. Nomás la condiciona a respetar las libertades y la división de poderes, a no indultar al exasesor presidencial Vladimiro Montesinos y a cumplir solo un mandato de cinco años, o sea, no querer perpetuarse en el poder.

El Nobel apenas si menciona las causas judiciales que acosan a la candidata y no impugna su intención de indultar a su padre si gana las elecciones. Extrañamente, critica a Castillo por no apoyar derechos como el matrimonio entre personas del mismo sexo, la educación sexual en las escuelas y el aborto, pero olvida que Fujimori también adhiere a estas visiones ultraconservadoras.

Como ya ha hecho en las elecciones de otro país, Vargas Llosa muestra un nulo respeto a las decisiones ciudadanas. Bajo la premisa "si no votan como les digo, están equivocados", concluye su artículo argumentando que los peruanos votaron mal en la primera vuelta y no deben cometer el mismo error en el ballotage.

Reacción

Fujimori agradeció de inmediato el aval de Vargas Llosa. Incluso hablaron por teléfono. Le prometió que ahora sí será una demócrata. Ver para creer.

"En estos momento no solo nos enfrentamos a la pandemia y al hambre, sino al comunismo. Me he comunicado con él (Vargas Llosa), le he agradecido su apoyo y he ratificado mi compromiso con la democracia, con la libertad de expresión e independencia de poderes. Perú necesita un reencuentro, que dejemos discrepancias", dijo ante un grupo de periodistas.

 Pero Vargas Llosa, el autoasumido adalid de la libertad y la democracia, quedaría contento con la victoria de Fujimori. Según sus parámetros, la sociedad peruana habría votado "bien". Por el "mal menor" que, como ya pasó con Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczinski, él les recomendó. Puede fallar.

En una entrevista en El Comercio, la candidata insistió con la amenaza de que, con Castillo como presidente, "Perú se convierta en Venezuela o Cuba", y minimizó el balance del gobierno de su padre: "Es verdad que genera polarización, hay un recuerdo positivo de muchas personas y también un recuerdo negativo, somos absolutamente conscientes de ello".

Minimizó así los asesinatos, los secuestros, las masacres y los actos de corrupción por los que Alberto Fujimori cumple condenas de hasta 25 años de prisión, o las esterilizaciones masivas y forzadas de mujeres por las que actualmente está siendo juzgado. Las víctimas de las violaciones de derechos humanos todavía tienen mucho para decir, mucho para acusar. Aun así, el primer objetivo de la candidata si gana la presidencia es sacar a su padre de la cárcel.

La impunidad sería también para ella.

Después de dos años de investigación, el fiscal José Domingo Pérez pidió el mes pasado una pena de 30 años y 10 meses de prisión en contra de Keiko Fujimori por los delitos de lavado de activos, crimen organizado, obstrucción de la justicia y falsa declaración. La denuncia central, que forma parte de las derivaciones del Lava Jato en Perú, es que durante sus campañas en 2011 y 2016 recibió millonarios aportes ilegales.

El juicio es inminente, pero si Fujimori ganara las elecciones de junio, quedaría protegida legalmente por el blindaje judicial del que gozan los presidentes peruanos. El proceso en su contra se paralizaría. Ya no sería juzgada, ni condenada.

Pero Vargas Llosa, el auto asumido adalid de la libertad y la democracia, quedaría contento. Según sus parámetros, la sociedad peruana habría votado "bien". Por el "mal menor" que, como ya pasó con Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczinski, él les recomendó. Puede fallar.

https://actualidad.rt.com/opinion/cecilia-gonzalez/389808-apoyo-vargas-llosa-keiko-fujimori-peru

 Recordemos un post anterior en este blog https://rebelion.org/que-quieren-los-libertarios-y-por-que-giraron-a-la-extrema-derecha/ Por otro lado nada extraño si se lee a Hayek Hayek ha sido objeto de críticas por su apoyo a regímenes dictatoriales, al respecto declararía al diario chileno el Mercurio del 12 de abril de 1981, en apoyo el régimen de Pinochet: “Mi preferencia personal se inclina a una dictadura liberal y no a un gobierno democrático donde todo liberalismo esté ausente”. En esta entrevista en el diario El Mercurio, Hayek se definió como enemigo del Estado del bienestar y la justicia social y se mostró preocupado por los poderes discrecionales del Estado" (a) o que Milton Friedman haya asesorado a dos dictaduras , recordemos  que en caso de Chile utilizaron la dictadura para imponer el modelo neoliberal hoy denostado en ese país y Vargas siempre alabo el modelo chileno. Capitalismo no es igual a democracia. y en el neoliberalismo la sociedad no existe .

nota (a)https://es.wikipedia.org/wiki/Friedrich_Hayek