domingo, 2 de noviembre de 2014

Cambios decisivos en el sistema global.

31/10/2014  

Cambios decisivos en el sistema global. Entre ilusiones y guerras desesperadas contra el tiempo

  .El FMI ha informado que en 2014 a nivel global el primer Producto Bruto Interno (medido a paridad de poder de compra) ya no es el de EEUU sino el de China.
Según esa información en 2014 China representa el 16,4 % del Producto Bruto Mundial contra 16,2 % de los Estados Unidos. En 1980 Estados Unidos representaba el 22,3 % y China solo 2,3 %. En el año 2004 Estados Unidos todavía parecía estar ubicado en una cima difícil de alcanzar con el 20,1 % del Producto Bruto Mundial y China crecía pero llegaba al 9,1 % (menos de la mitad del PBI estadounidense). En diez años más se equilibró la balanza y de acuerdo al pronóstico del FMI la diferencia a favor de China aumentará en los próximos años.
Leer texto completo [PDF]
Tomado de http://beinstein.lahaine.org/

viernes, 31 de octubre de 2014

El Congreso aprueba la censura y amordaza la libertad de prensa.

El Congreso aprueba la censura y amordaza la libertad de prensa
Cómo te afecta la nueva (y vergonzosa) Ley de Propiedad Intelectual

Gizmondo


No hay vuelta atrás. La reforma de la Ley de Propiedad Intelectual (LPI) española acaba de aprobarse en el Pleno del Congreso de los Diputados por 172 votos a favor (solo los del Partido Popular), 144 en contra y 3 abstenciones. Era el último paso que necesitaba para entrar en vigor el próximo 1 de enero de 2015. La nueva Ley ha levantado una fuerte polémica porque, básicamente, intenta regular y controlar Internet en beneficio de unos pocos. Y lo hace de una forma burda e ineficiente. Y te afecta a ti (y a cualquier usuario de Internet) mucho más de lo que pensabas. ¿Cómo?
La reforma de la Ley de Propiedad Intelectual (puedes acceder a las enmiendas y al texto íntegro aquí) intenta por encima de todo controlar qué compartimos en Internet y cómo lo compartimos.
Se trata de una vuelta de tuerca de la anterior ley conocida como "Ley Sinde" que introduce nuevos supuestos para facilitar, entre otras cosas, el cierre e imposición de multas a páginas web de enlaces. El problema es que la ambigüedad con la que ha sido redactada introduce una inseguridad jurídica tan fuerte que afecta a todo Internet. Además, incluye el polémico canon AEDE o "tasa Google", que en esencia restringe nuestro derecho a la información.
¿Cómo te afecta la LPI? Sobre todo en estos 4 puntos clave:
1) Limita tu acceso a la cultura
La nueva LPI, en sus artículos 157 y 158, establece como ilegal ofrecer en Internet listados ordenados y clasificados de enlaces, independientemente de que las páginas que los publiquen muestren publicidad o no para lucrarse. Una comisión de propiedad intelectual creada por el gobierno podrá, sin necesidad de permiso judicial, cerrar páginas web de enlaces o multarlas con sanciones de hasta 600.000 euros. E incluso podrá perseguir a los proveedores de esas páginas (empresas de hosting, pagos online etc).
"La Ley abre la posibilidad al Estado de sabotear cualquier contenido online por el simple uso del miedo. ¿Se va a arriesgar un proveedor de hosting a una multa de 600.000 euros por dar alojamiento a una web de enlaces? No.", explica a Gizmodo en Español el abogado especializado en Internet Carlos Sánchez Almeida, y autor del blog Jaque Perpetuo. Y añade: "Este sistema de censura es el mismo que se empleó con Wikileaks: intentar ahogarlo económicamente cerrando su acceso a PayPal, servicios de hosting, tarjetas de crédito...".
En la práctica, al final lo que se consigue es criminalizar el enlace a contenidos compartidos entre usuarios. "Lo que la LPI está prohibiendo ahora es compartir en Internet nuestras librerías de contenidos. Compartir es algo que el ser humano ha hecho toda la vida, solo que ahora lo hacemos online. Hay que buscar una forma de compensar directamente a los autores de los contenidos, sin editores de por medio, pero nadie ha pensado en cómo hacerlo. En lugar de ello, la LPI solo propone cierres y multas. El acceso a los contenidos y la cultura es lo que realmente sale perdiendo".
2) Restringe tu derecho a la información
Otro de los puntos más polémicos que introduce la ley en su artículo 32.2 es el llamado canon AEDE o "tasa Google". En esencia, obliga a los agregadores de contenidos online como Google News o Menéame (pero también potencialmente Facebook, Twitter y decenas de páginas) a pagar un canon para compensar por los contenidos que estos enlazan de los medios de AEDE (asociación formada por medios impresos adscritos a grandes grupos empresariales). De no hacerlo, se enfrentan también a multas de entre 150.000 y 600.000 euros.
"Es pura censura, una restricción del derecho de información de los ciudadanos. Cualquier página web que ponga listados de noticias o que agregue noticias de forma sistemática, debería pagar este canon o arriesgarse a una enorme multa. Por ejemplo, un blog creado por un usuario cualquiera que enlace a estas noticias de los medios AEDE, tendría que pagar", explica Almeida.
El artículo de la ley está fabricado a medida de los grandes medios de comunicación miembros de AEDE acosados por el cambio de su modelo de negocio y que ven en agregadores como Google News la fuente de todos sus males. Además de no tener ni pies ni cabeza (Google News es una fuente de tráfico para estos medios y ni siquiera incluye publicidad), el efecto final de la ley es restringir directamente el acceso a la información libre de los ciudadanos.
El resultado de esta medida es que España se convierte en el único país en el mundo en el que, por enlazar contenidos públicos de Internet, hay que pasar por caja. El Gobierno y un lobby (los medios de AEDE) pasan a controlar no solo buena parte de la información que se comparte en Internet, sino cómo se comparte. ¿Te suena? Exacto, hay un país que aplica un sistema de control y censura muy similar: China.
La aprobación hoy de la reforma de la LPI con el canon AEDE resulta aún más paradójica teniendo en cuenta que justo el pasado lunes el Tribunal de Justicia Europeo (TJUE) dictaminó que insertar en una web un vídeo sujeto a derechos de autor no infringe el copyright, porque no es un acto de explotación, de "comunicación pública". Como explica el abogado David Maeztu, la sentencia resuelve el caso en el que una compañía (BestWater) propietaria de los derechos de un vídeo subido a YouTube, demandó a otros usuarios por utilizar ese vídeo en sus páginas web y sin su permiso. Según la sentencia:
La puesta a disposición en un sitio web de una obra inserta en otro sitio web a través de un vínculo mediante la técnica de la "transclusión," tal como se utiliza en el litigio principal, no puede ser llamada "comunicación al público"
Es decir: enlazar no es una acto de comunicación pública, según el TJUE, por lo que no se puede considerar una infracción del copyright. Trasladado a España y al canon AEDE, que pretende cobrar a compañías como Google por enlazar, este nace ya contrario a derecho europeo o, como dice Maeztu, el canon AEDE nace muerto. ¿Cómo es posible que España haya aprobado una ley contraria a las leyes europeas? Aún hay más.
3) Puede obligar a cerrar tu empresa
Como resultado de lo anterior, la inseguridad jurídica y empresarial que abre la reforma de la LPI es bestial. El hecho de que una administración pueda cerrar una página web sin ninguna intervención judicial hará que muchas empresas de Internet, emprendedores y usuarios se piensen dos veces realizar ciertas actividades económicas. Otros se verán abocados a establecer la sede social de su empresa fuera de España -o cerrar.
"Ante la disyuntiva de una multa o cerrar la página, mucha gente decidirá ni siquiera empezar, no arriesgarse. Eso es censura. Directamente no va a haber página. La gente ya ni se lo va a plantear. Por ejemplo, una empresa de hosting pequeña no puede estar recurriendo multas y pagando abogados. Al final es actividad económica que se va a perder", señala Almeida.
Y esa es la clave: en lugar de impulsar nuevas actividades online y, con la actividad económica generada, idear mecanismos de retribución de los autores de contenido, la nueva LPI pretende prohibir, cerrar y multar. En otras palabras: anclarnos en modelos de negocio antiguos y obsoletos.
4) Tendrás que pagar más por ir a la Universidad
Con la nueva Ley de Propiedad Intelectual se establece otro canon: el que las universidades públicas y privadas tendrán que pagar a la entidad de gestión CEDRO (según ellos, "asociación sin ánimo de lucro de autores y editores de libros, revistas y otras publicaciones") por utilizar materiales académicos en campus virtuales, la mayor parte de los cuales (irónico) están bajo licencia Creative Commons.
Como explica el abogado especializado en Internet Javier de la Cueva, "las universidades tendrán que pagar 5 euros por alumno. Si coges el número de alumnos y Universidades, sale a 8 millones de euros anuales a favor de CEDRO. Un disparate".
[Leer más: "La nueva Ley de Propiedad Intelectual es fruto de la corrupción"]
¿Resultado a medio y largo plazo? "L as Universidades privadas probablemente incrementarán el precio de sus matrículas, y las públicas también: una parte en lo que pagan los ciudadanos, y otra en lo que paga la Administración Pública. Al final todo ese dinero saldrá de nosotros. Y no solo eso. El problema es que se está produciendo una apropiación privada del conocimiento, y del llamado Open Access", explica de la Cueva.
Esta es la ley que acaba de aprobar el Gobierno español y que nos acerca a países como China en materia de censura y control de Internet. "Es una ley al margen de la voluntad de los ciudadanos, un caso de cómo se está gobernando en favor de solo unos pocos. Es un ejemplo de libro de la corrupción del sistema". Más claro, imposible.
Si quieres leer más detalles sobre la nueva LPI, sus consecuencias y resquicios jurídicos, no te pierdas este detallado artículo y este otro.
Fuente: http://es.gizmodo.com/como-te-afecta-la-nueva-y-vergonzosa-ley-de-propiedad-1652346316

jueves, 30 de octubre de 2014

Cofely y sus contratos sanitarios.

Cofely, la empresa implicada en la operación “Púnica”, también tiene contratos en el sector sanitario



Entre ellos, el “Mantenimiento, conservación y reparación de edificios de los centros de salud de las actuales Áreas 1, 3,4 y 5” de Madrid y también el mantenimiento de centros de salud en la comunidad de Asturias.
En el caso de Madrid, la Viceconsejería de Asistencia Sanitaria del Servicio Madrileño de Salud publicó una resolución en el BOCM el 27 de enero de 2011 por el que se adjudicaba a Cofely el mantenimiento, conservación y reparación de edificios de los centros de salud de las antiguas Áreas 1, 3, 4 y 5. La licitación se realizó por un importe total de 1, 2 millones de €, pero Cofely rebajó la adjudicación la mitad, hasta 586.000 € quedándose con ella.
El segundo lote de centros de salud, de las antiguas áreas 6, 7, 8, 9, 10 y 11, fue adjudicado a la empresa “Velasco Obras y Servicios, S.L.-Fernández Molina Obras y Servicios, Sociedad Anónima” por 950.000 €.
En Galicia también tiene un contrato de 11 millones con el SERGAS para el suministro eléctrico y conservación del Hospital de O Salnés y quince ambulatorios, así como la redacción del proyecto, mantenimiento y suministro eléctrico del futuro del centro de salud de Marín.
En Castilla La Mancha Cofely se adjudicó el mantenimiento de 40 centros de salud en la provincia de Toledo y el mantenimiento de su Centro de Datos.
Enlace relacionado

miércoles, 29 de octubre de 2014

La construcción mediática de los "yihadistas".


  29-10-2014

La construcción mediática de los "yihadistas"

http://michelcollon.info


Un nuevo término ha entrado en el vocabulario usual del francés en los últimos meses, el de "yihadista". Los grandes medios de comunicación abordan diariamente el tema y difunden un marco de interpretación que modela la opinión pública, orientando las reacciones y suscitando tomas de posición. Para dar un aval científico a afirmaciones mediáticas, se acude a la ayuda de "expertos" y "especialistas" de nombres rimbombantes. Pero, más allá de una aparente diversidad de opiniones, se esconde una unidad de análisis. A pesar de la impresión de objetividad de los artículos y reportajes, pueden identificarse de forma constante estas cuatro recurrencias ideológicas: los prejuicios sobre el Islam, las coacciones hacia los musulmanes para que se justifiquen por su fe, la negación de las causas internas en los países occidentales, y la justificación de la guerra. Estos cuatro discursos mediáticos, al ser difundidos sobre un fondo sensacionalista, no son baladies. Tienen una función social y política muy concreta. Juntos, ayudan a producir una realidad social y política con graves consecuencias.  El sensacionalismo
El tono dominante del discurso mediático es el del sensacionalismo. Nos encontrariamos ante un fenómeno sensacional, no sólo inédito sino también impredecible. Se repiten cifras y se subrayan las fulgurantes progresiones de las partidas hacia Siria:
"Nunca ha sido tan elevado el número oficial de participantes franceses en la yihad. En julio, el ministro del Interior estimaba en 800 el número de personas participantes en operaciones islamistas en Oriente Medio. Una cifra que ya se había incrementado en un 56% en pocos meses: eran 500 en abril. Un año antes, en marzo de 2013, no eran más que 50 franceses los que habían elegido la yihad. Es un aumento constante del número de combatientes voluntarios que muestra las dificultades en detener el flujo de partidas hacia Irak o Siria." (1)
Los titulares angustiosos protagonizan las portadas de nuestra prensa y noticias, o la presentacion de los reportajes de actualidad:
“Yihadismo, una Francia mal protegida ", según el diario “Express"; “La Situación de la amenaza terrorista en Francia ", según el diario “I-télé” (2), los yihadistas se entrenan en la zona de las Ardenas belgas” según el diario L’Union l’ Ardennais (3), etc.
La fábrica del miedo funciona a todo trapo, con sus dos consecuencias lógicas: la renuncia a la explicación racional, lo que por una parte favorecera las reacciones emocionales, y por la otra la demanda de seguridad, que será aceptada incluso en detrimento de las libertades esenciales. Ya no se trata solo de perseguir los objetivos actuales, sino que la escalada de una lógica basada en la seguridad se instala profundamente en nuestra sociedad. Este mecanismo ha sido descrito de la siguiente manera por Serge Quadrupanni:
"El antiterrorismo es la punta de lanza, la vanguardia conceptual y la práctica de una política del miedo que tiende a infiltrarse en todos los rincones de la sociedad. Esta política de producción simultánea de temores y de controles supuestamente justificados para frenarlos y contenerlos, esta condenada a inventarse constantemente nuevos enemigos: después del terrorista, serán los jóvenes de barrios populares o simplemente los jóvenes, los niños, el internauta, el loco, el inmigrante, el extranjero, el musulman, el gitano (1), ..." 
Pero evitemos la critica que nos pueda situar bajo "la teoría de la conspiración", ya que ésta aparece constantemente como un “comodín” ante cada cuestionamiento de los mecanismos de dominación. No hay necesidad de creer en ninguna "teoría de la conspiración" para determinar la existencia de una estrategia por parte de las clases dominantes, en su pretensión de guiar a la opinión pública para enmascarar la realidad e imponer decisiones, presentándolas como deseables y necesarias. 
Esencialismo
El primer leitmotiv de los discursos mediáticos dominantes, impuesto por el sensacionalismo, es una construcción esencialista del Islam. El esencialismo es pues el proceso del pensamiento que consiste en homogeneizar una realidad plural, en hacer que pierda su carácter histórico, y en presentarla de forma reconstruida, como una explicación invariable al conjunto de los acontecimientos y / o de los comportamientos de las personas de las que se pretende que formen parte de esa realidad.
Durante muchos años, esta construcción esencialista (o estereotipada, tergiversada, ndT) del Islam, se difunde a través de múltiples canales con la consecuencia de un un aumento de la islamofobia: según esa reconstruccion, se presenta el Islam como incapaz de concebir la diferencia entre la religión y la política, de lo cual se deriva lógicamente una alergia de los musulmanes hacia la democracia. Se basaria en una desigualdad de género con el resultado lógico de un sexismo exacerbado por parte de los hombres musulmanes, y de una sumisión igualmente significativa por parte de las mujeres musulmanas. Todo ello seria incompatible con el racionalismo y por esa misma razon conduciria a una mayor tendencia al fanatismo, etc.
Una de las consecuencias del proceso del esencialismo es el uso como sinónimo de los términos "Islam" y "musulmán". De esta manera, todos los comportamientos de los musulmanes pueden explicarse por ese Islam presentado como una esencia, esencializado. El boxeador Mohammed Ali respondió de manera fulminante a este tipo de razonamiento en una famosa entrevista con un periodista sobre los ataques del 11 de septiembre: "¿Cómo se siente acerca de la idea de que usted comparta la misma fe con los sospechosos arrestados por el FBI ? - "Y usted", contestó, "¿cómo se siente acerca de la idea de que Hitler compartió la suya? (1)".     
La frecuente división binaria entre musulmanes "moderados" y "musulmanes radicales" no cambia nada fundamental en la cuestión de la esencialización. El musulmán moderado seria el que practica el Islam con moderación, y el musulmán radical, el que practica el Islam sin moderación. En definitiva, esta división binaria y esencialista atribuye a la palabra "radical" un certificado de “islamidad”, ya que si se necesita moderar el Islam, entonces es porque lleva en él, en su esencia, tendencias peligrosas. Como destaca Maurice Tarik Maschino "el musulmán moderado es una abstracción, un pseudo concepto o concepto de guerra, cuya función es la de despertar en la imaginación de los lectores, los estereotipos habituales que estigmatizan a los musulmanes. (2)".
Coacción
La división binaria conlleva una lógica de sospecha. Al mismo tiempo que se aplaude al "musulmán moderado", a los "radicales" se les piden explicaciones, que tomen la palabra, que emitan condenas. El musulmán es de alguna manera responsable de todos los actos y declaraciones que se hagan en el nombre del Islam por cualquier persona en este planeta que se reivindique de esta religión. Sus silencios son diagnosticados en el mejor de los casos como irresponsabilidad y en el peor, como complicidad.
Es asi como el periódico francés Le Figaro, pudo iniciar una encuesta el pasado 25 de septiembre en torno a la siguiente pregunta, tan significativa: "¿Manifiestan suficientemente los musulmanes franceses su oposición a la amenaza terrorista?
Por su parte, La Libre Belgique puede titular uno de sus artículos del 28 de septiembre de la siguiente manera: "¿Deben los musulmanes disociarse de los yihadistas? "
La campaña "NotInMyName" (No en mi nombre) no solamente protagoniza los titulares de todos los medios de comunicación durante varios días, sino que es retomada por el propio presidente Obama, quien declaró en la Asamblea General de las Naciones Unidas el 24 de septiembre que: "Es hora de que el mundo - y en particular las comunidades musulmanas - rechacen explícitamente con firmeza y de forma sistemática, la ideología de al Qaeda y el Estado islámico".
Mientras que la acusación de "comunitarismo" ha llegado a ser frecuente al abordar las cuestiones referidas al Islam, ahora se les pide a los musulmanes que se expresen como comunidad. Que se presten al juego de la condena, o que rechacen la coacción de tener que justificarse, el resultado es el mismo: la reproducción del estereotipo que presenta a los "musulmanes" como totalidad homogénea y vacía de contradicciones.
La coacción de tener que justificarse bajo la misma lógica que la de los "castigos colectivos" de la época colonial. Antaño, se podía condenar a grupos enteros por delitos que no habían cometido, mientras que ahora hay grupos enteros que deben justificarse por hechos de los cuales no son responsables. Porque, evidentemente, ¡ojo con el silencio!: es percibido inmediatamente como sinónimo de complicidad. 
La lógica no es nueva y ya se ha utilizado muchas veces en el pasado respecto a la inmigración y a sus hijos, que son las nuevas generaciones de franceses. Por tomar sólo un ejemplo, recordemos las revueltas de los barrios populares de noviembre 2005 en Francia. A las personas de origen inmigrante se las invitaba a los platós de televisión únicamente para formularles una pregunta: la que tenia que ver con la condena de las revueltas. Pero podríamos citar igualmente la coacción (cuando uno es de origen inmigrante), de tener que demostrar que se está integrado, que no se es homófobo, ni sexista, ni antisemita, etc…
Negación
La esencialización y la coacción que conduce a justificarse, tienen una función social y política: la de ocultar las causas que pueden conducir a unos jóvenes franceses a ser candidatos para irse a Siria. En todos los procesos sociales, el cuestionamiento únicamente de la "oferta" (en este caso la oferta de "yihadismo") conduce a una reducción de la realidad.
El silencio sobre la "demanda" es una negación de las verdaderas causas del proceso estudiado. Hay mucho en juego, ya que la toma en consideración de la demanda nos lleva a interesarnos por las condiciones materiales de la existencia de una parte de nuestra población, cuyo origen es la inmigración postcolonial.
Ahora bien, esas condiciones revelan una discriminación masiva y sistémica, haciendo impensable el porvenir para numerosos jóvenes. Esas condiciones resaltan una precariedad, haciendo de lo cotidiano algo insoportable. Ponen de relieve una relación con la policia basada en controles de identificación de un ritmo de excesiva regularidad, lo cual produce un sentimiento difuso de inseguridad.
Además sacan a la luz un estado de sospecha permanente en los medios de comunicación, con una islamofobia en crecimiento exponencial durante estas ultimas décadas. Todos estos son los factores que pueden coagularse en trayectorias individuales que hacen emerger una "demanda", exactamente como causas similares pueden llevar a otros jóvenes a comportamientos suicidas, a necesidad o demanda de una secta, a la violencia contra sí mismo y contra los suyos.
La explicación mediática en términos de "auto-radicalización", que se ha hecho tan común, no rompe con esta negación de las causas de la demanda. Quienes formulan la “oferta”, se habrían convertido en expertos del adoctrinamiento informático, y esto sería suficiente para explicar todo el proceso. Una vez más, se elimina el cuestionamiento acerca de los factores que hacen a algunos más idóneos para esta oferta. El barniz de tipo psicológico de numerosos reportajes tienen como objetivo cubrir, bajo un discurso pretendidamente cientifico, la operación de negación de las causas reales. 
La justificación
La esencialización, la coacción y la negación conducen finalmente a evitar todo debate sobre los objetivos reales de las guerras. Todo lo que está en juego a nivel geoestratégico y energético (gas y petróleo) desaparece por completo del debate, para dejar únicamente cabida a la urgencia de un consenso "anti-barbarie".
La operación ha sido, por ahora, todo un éxito: Las intervenciones en Siria, en Costa de Marfil y en CentroÁfrica aún no generan grandes reacciones. Al reunir al conjunto de los actores sociales susceptibles de oponerse a la guerra, en un clima de pavor y en medio de explicaciones esencialistas, se consigue destruir el movimiento de “no a la guerra” y “anti-imperialista”. Ese clima y esas explicaciones permiten que no nos cuestionemos las tácticas y estrategias utilizadas concretamente, como por ejemplo el apoyo a grupos que mas tarde se pretende combatir, la presentacion de monarquías oscurantistas (Arabia Saudita, Qatar, etc) como aliados, etc…
Es asi como la construcción mediática de los yihadistas se inscribe en el marco de una estrategia de guerra. Poco importa que esto se haga de forma consciente o no, por los actores de los medios de comunicación: el resultado es el mismo.

Notas:
1) Le Figaro.fr del 14-09-2014.
2) L’Express N° 3300 del 1-10-2014.
3) I-télé del 15 septembre 2014.
4) L’Union l’Ardennais del 3-10-2014.
5) Serge Quadrupanni, La politique de la peur, Seuil, Paris, 2011, p. 24.
6) Para una critica profundizada de la invencion de la teoria de la conspiracion y su instrumentalizacion (en particular por Taguief et Boudon) contra cualquier critica del sistema de dominacion capitalista, vease : "L’invention de la théorie du complot ou les aveux de la sociologie libérale, in Terreur et Possession, enquête sur la police des populations à l’ère technologique", éditions de l’échappée, Paris, 2008.
7) Palabras citadas por Sylvain Cypel en Le Monde, el 6 octubre 2001
8) Maurice Tarik Maschino, Qu’est-ce qu’un musulman modéré ?, El Watan du 28 mars 2012.

Traducción: Colectivo Investig'Action 
Fuente original: http://michelcollon.info/La-construction-mediatique-des.html

martes, 28 de octubre de 2014

Los kurdos libertarios de Kobane.



Democracia directa
El misterio de Kobane

Asia Times Online

28/10/14

Las valerosas mujeres de Kobane –donde los kurdos sirios combaten desesperadamente contra el EI (ISIS)– están a punto de ser traicionadas por la “comunidad internacional”. Estas guerreras también combaten, además de contra los terroristas del Califa Ibrahim, contra los planes traicioneros de EE.UU., Turquía y la administración del Kurdistán iraquí.
¿Qué pasa realmente en Kobane?
Comencemos por hablar de Rojava. El verdadero significado de Rojava –las tres provincias de mayoría kurda del norte de Siria– es transmitido por este editorial (en turco) publicado por el activista encarcelado Kenan Kirkaya. Argumenta que Rojava es el hogar de un “modelo revolucionario que desafía ni más ni menos que 'la hegemonía del sistema capitalista de nación-estado'”– mucho más allá de su significado regional “para los kurdos, los sirios o el Kurdistán”.
Kobane –una región agrícola– se encuentra en el epicentro de este experimento no violento en democracia, posibilitado por un acuerdo a principios de la tragedia siria entre Damasco y Rojava (no apoyéis el cambio de régimen contra nosotros y os dejaremos tranquilos). Aquí, por ejemplo, se argumenta que “incluso si un único aspecto de un verdadero socialismo pudiera sobrevivir allí, millones de descontentos serían atraídos por Kobane”.
En Rojava, la toma de decisiones es a través de asambleas populares, multiculturales y multireligiosas. Los tres máximos funcionarios de cada municipalidad son un kurdo, un árabe y un cristiano asirio o armenio; y por lo menos unos de los tres debe ser mujer. Las minorías no kurdas tienen sus propias instituciones y hablan sus propios idiomas.
Entre una miríada de consejos de mujeres y jóvenes también hay un crecientemente famoso ejército feminista, la milicia Estrella YJA (“Unión de mujeres libres”, y la estrella simboliza la diosa mesopotámica Ishtar).
El simbolismo no podía ser más gráfico: pensad en las fuerzas de Ishtar (Mesopotamia) combatiendo contra las fuerzas de ISIS (originalmente una diosa egipcia), convertida en un califato intolerante. En el joven Siglo XXI, las barricadas femeninas de Kobane se encuentran en la vanguardia de la lucha contra el fascismo.
Inevitablemente debería haber un buen número de puntos de intersección entre las Brigadas Internacionales que combatieron al fascismo en España en 1936 y lo que está sucediendo en Rojava, como subraya uno de los escasos artículos al respecto publicados en medios dominantes occidentales.
Por si estos componentes no bastaran para enloquecer a wahabíes y takfiris, profundamente intolerantes, y a sus poderosos patrocinadores en petrodólares del Golfo, existe la situación política general.
La lucha en Rojava es dirigida esencialmente por el PYD, que es la rama siria del PKK turco, las guerrillas marxistas en guerra contra Ankara desde la década de los 70. Washington, Bruselas y la OTAN –bajo permanente presión turca– siempre han catalogado al PYD y al PKK de “terroristas”.
Un cuidadoso examen del indispensable libro del líder del PKK Abdullah Öcalan Confederalismo democrático revela que esa ecuación terrorista/estalinista es un engaño (Öcalan ha estado confinado en la isla-prisión de Imrali desde 1999.)
Lo que buscan el PKK –y el PYD– es “municipalismo libertario”. De hecho es exactamente lo que Rojava ha estado intentando: comunidades con autogobernadas que aplican la democracia directa, utilizando como pilares concejos, asambleas populares, cooperativas dirigidas por trabajadores y defendidas por milicias populares. De ahí el posicionamiento de Rojava en la vanguardia de un movimiento mundial de economía/democracia cooperativa cuyo objetivo en última instancia sería dejar de lado el concepto de una nación-estado.
Este experimento no solo tiene lugar políticamente en el norte de Siria; en términos militares, fueron el PKK y el PYD los que realmente lograron rescatar esas decenas de miles de yazidis acorralados por el EI/ISIS en el Monte Sijar, y no las bombas estadounidenses, como decían los medios de información dominantes. Y ahora, como detalla la copresidente del PYD Asya Abdullah, lo que se requiere es un “corredor” para romper el sitio de Kobane por los terroristas de Califa Ibrahim.
Los tejemanejes del Sultán Erdogan
Ankara, mientras tanto, parece proponerse prolongar una política de “muchos problemas con nuestros vecinos”.
Para el ministro de Defensa turco, Ismet Yilmaz, “la principal causa del EI es el régimen sirio”. Y el Primer Ministro Ahmet Davutoglu –quien inventó la difunta doctrina de “cero problemas con nuestros vecinos” para comenzar– ha subrayado repetidamente que Ankara solo intervendrá con tropas en el terreno en Kobane para defender a los kurdos si Washington presenta un “plan post-Asad”.
Y luego existe un personaje que desborda la realidad: el presidente turco Tayyip Erdogan, conocido también como el sultán Erdogan.
Los edictos del sultán Erdogan son bien conocidos. Los kurdos sirios deberían combatir contra Damasco bajo el comando de esa ficción de mala muerte, el Ejército Libre Sirio, reconstituido (que debe ser entrenado, precisamente, en Arabia Saudí); deberían dejar de lado cualquier idea de autonomía; deberían aceptar dócilmente la solicitud turca de que Washington cree una zona de exclusión aérea sobre Siria y también una frontera “asegurada” en territorio sirio. No es sorprendente que tanto el PYD como Washington hayan rechazado esas demandas.
El sultán Erdogan se ha propuesto relanzar el proceso de paz con el PKK y quiere conducirlo desde una posición de fuerza. Hasta ahora su única concesión ha sido permitir que los peshmergas kurdos iraquíes entren en el norte de Siria como contrapeso de las milicias de PYD-PKK e impedir de esa manera el fortalecimiento de un eje kurdo antiturco.
Al mismo tiempo, el sultán Erdogan sabe que el EI/ISIS ya ha reclutado hasta 1.000 dueños de pasaportes turcos y que la cantidad sigue aumentando. Su pesadilla adicional es que la mezcla ponzoñosa que destruye “Siraq” se extienda tarde o temprano poderosamente dentro de las fronteras turcas.
Cuidado con esos bárbaros a las puertas
Los terroristas de Califa Ibrahim ya han telegrafiado su intención de masacrar y/o esclavizar a toda la población civil de Kobane. Y sin embargo Kobane, per se, no tiene ningún valor estratégico para el EI/ISIS (es lo que el propio Secretario de Estado de EE.UU. John Kerry dijo la semana pasada; pero luego, predeciblemente, se retractó). Sin embargo, la muy persuasiva comandante del PYD es plenamente consciente de la amenaza del EI/ISIS.
Kobane no es esencial en comparación con Deir ez-Zor (que tiene un aeropuerto que abastece al Ejército Árabe Sirio) o Hasakah (que tiene campos petrolíferos controlados por los kurdos con la ayuda del Ejército Árabe Sirio). Kobane no tiene aeropuerto ni campos de petróleo.
Por otra parte, la caída de Kobane generaría una inmensa y adicional publicidad positiva a la muy hábil empresa del Califa ampliando la percepción de un ejército victorioso, especialmente entre los nuevos potenciales reclutas, con pasaportes de la UE, así como estableciendo una sólida base muy cerca de la frontera turca.
Esencialmente, lo que el sultán Erdogan está haciendo es combatir tanto a Damasco (a largo plazo) como a los kurdos (a medio plazo) mientras realmente otorga vía libre (a corto plazo) al EI/ISIS. Y sin embargo, más adelante, el periodista turco Fehim Tastekin tiene razón; el entrenamiento de los inexistentes rebeldes sirios “moderados” en la democrática Arabia Saudí solo conducirá a la "paquistanización" de Turquía. Un remix del escenario que tuvo lugar durante la yihad afgana de la década de los 80.
Por si esto no fuera bastante confuso, en un cambio del terreno de juego –y revirtiendo su dogma “terrorista”– Washington mantiene ahora un acuerdo cordial con el PYD. Y eso plantea un dolor de cabeza adicional al sultán Erdogan.
Este toma y daca entre Washington y el PYD todavía existe. Sin embargo algunos hechos sobre el terreno lo dicen todo: más bombardeos de EE.UU., más lanzamientos desde el aire de EE.UU., incluyendo grandes lanzamientos fracasados en los que las nuevas armas acaban en manos de los terroristas de El Califa).
No hay que olvidar un hecho clave. En cuanto el PYD fue más o menos “reconocido” por Washington, el jefe del PYD, Saleh Muslim, fue a reunirse con el astuto líder del Gobierno Regional del Kurdistán (KRG), Masoud Barzani. En esa ocasión el PYD prometió “compartir el poder” con los peshmergas de Barzani en el gobierno de Rojava.
Los kurdos sirios que fueron obligados a abandonar Kobane y a exiliarse en Turquía, y que apoyan al PYD, no pueden volver a Siria; pero los kurdos iraquíes pueden ir y volver. Este sospechoso acuerdo fue negociado por el jefe de inteligencia del KRG, Lahur Talabani. El KRG, crucialmente, se lleva muy bien con Ankara.
Esto arroja más luz sobre el juego de Erdogan: quiere que los peshmergas, feroces enemigos del PKK, se conviertan en la vanguardia contra el EI/ISIS y que de esa manera se debilite la alianza PYD/PKK. Una vez más, Turquía usa kurdos contra kurdos.
Washington, por su parte, está manipulando Kobane para legitimar completamente –utilizando una vena “humanitaria” R2P (Responsabilidad de proteger)– su cruzada contra el EI/ISIS. Nunca se recuerda suficientemente que todo el asunto comenzó por una andanada de sesgo de Washington sobre la preparación por el espurio y fantasmal grupo de Jorasán de un nuevo 11-S. Jorasán, como era de esperar, desapareció por completo del ciclo noticioso.
A largo plazo, el tejemaneje estadounidense es una seria amenaza para el experimento de democracia directa en Rojava, que Washington solo puede interpretar como –¡Dios nos libre!– un retorno del comunismo.
Por lo tanto Kobane es ahora un peón crucial en el despiadado juego que manipula Washington, Ankara e Irbil. Ninguno de esos actores quiere que el experimento de democracia directa de Kobane y Rojava tenga éxito, se expanda y comience a conocerse en todo el Sur Global. Las mujeres de Kobane corren un peligro mortal de ser, si no esclavizadas, cruelmente traicionadas.
Y el asunto se vuelve todavía más siniestro cuando la acción del EI/ISIL en Kobane se ve, esencialmente, como es: una maniobra de distracción, una trampa para el gobierno de Obama. En realidad los terroristas del Califa apuntan a la provincia Anbar en Irak –que ya controlan en gran parte– y el crucial cinturón de Bagdad. Los bárbaros están a las puertas, no solo de Kobane, sino también de Bagdad.

Pepe Escobar es autor de Globalistan: How the Globalized World is Dissolving into Liquid War (Nimble Books, 2007), Red Zone Blues: a snapshot of Baghdad during the surge (Nimble Books, 2007) y Obama does Globalistan (Nimble Books, 2009). Contacto: pepeasia@yahoo.com
(Copyright 2014 Asia Times Online (Holdings) Ltd. All rights reserved.
Fuente: http://www.atimes.com/atimes/Middle_East/MID-01-241014.html


 Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens



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Nota: (1) Texto completo de la Constitución de las regiones de Kobane, Jazireh y Afrin: http://www.resumenlatinoamericano.org/?p=5926


 Los kurdos y Turquía...

 








 

lunes, 27 de octubre de 2014

Marx y Spinoza.



 


-Marx y el aenigma Spinoza
Nicolás González Varela



Cataluña 9-N .-No ser para votar , sino votar para ser.









 Las trampas de la consulta

Francisco J. Laporta 20 OCT 2014 -
El País.
Federalistes d'Esquerres




Siempre he pensado que nacionalismo y democracia son dos idearios poco compatibles. La democracia descansa en los ciudadanos pensados individualmente, el nacionalismo en cambio en un todo social —la nación, el pueblo— por encima de ellos. Para la democracia el ciudadano es singular, autónomo e independiente. Para el nacionalismo la ciudadanía es sobre todo pertenencia. Lo que define tu identidad en el ideal democrático es tu individualidad libre y creadora; en el ideal nacionalista, tu pertenencia al todo nacional. Por eso los nacionalistas siempre hablan en nombre de la patria; los demócratas, en nombre de los ciudadanos. Y eso es también lo que hace tentadora la idea de que el mejor antídoto contra el nacionalismo es la democracia. A cada afirmación nacionalista sobre los rasgos y preferencias del “pueblo” debería poder responderse con una pregunta ciudadano por ciudadano. Los resultados serían sorprendentes.
Esto, sin embargo, no parece encajar con el terco empeño que está exhibiendo el nacionalismo catalán en consultar al poble si quiere que Cataluña sea un Estado independiente. “Queremos votar”. El argumento se presenta como irrebatible: si uno es demócrata ha de aceptar que el pueblo catalán, voto a voto, manifieste su posición sobre el tema. ¿No es esto contrario a lo que he afirmado? Creo que no, y para argumentarlo voy a tratar de indagar un poco si hay en el empeño alguna trampa o ardid escondido.
Lo más sorprendente de la posición oficial de la Generalitat y la mayoría nacionalista del Parlamento catalán es que saben que las encuestas de que se dispone hasta el momento, incluso las más sesgadas, vienen afirmando sistemáticamente que la posición independentista no es mayoritaria en Cataluña. Está creciendo mucho, pero no es mayoritaria. Tienen pues que saber que una pregunta sobre el tema lleva hoy por hoy las de perder. Y sin embargo se obstinan en hacer la pregunta. ¿Por qué? La respuesta no puede ser más que esta: en realidad, cualquiera que sea el resultado de la consulta, al realizarla habrán conseguido el reconocimiento jurídico y político de Cataluña como un demos que tiene derecho a manifestarse como sujeto político autónomo. He ahí la trampa subyacente. No es que Cataluña sea una nación y en virtud de ello tenga derecho a decidir; es que si se le reconoce tal derecho se le está atribuyendo la condición de sujeto político con un cuerpo electoral propio. Y si además ese derecho a pronunciarse versa, como es el caso, sobre quién ha de ser el depositario de la soberanía política, entonces se le está reconociendo como nación política.
Al simplificar cuestiones complejas se cuelan mercancías difíciles de vender a cara descubierta
Lo que busca, pues, esa porfía por hacer la consulta no es un ejercicio de democracia, sino que se reconozca jurídicamente al pueblo de Cataluña el título político de sujeto decisor, porque eso sería un reconocimiento institucional de su carácter de nación. Lo que en definitiva persigue es votar la pregunta, porque el mero hecho de votarla lleva consigo la creación del título para ello, la pretensión de soberanía. Si nos permiten votar esa cuestión, eso significa que tenemos derecho a hacerlo. Y desde esa perspectiva, claro, el resultado da igual. Lo importante es la definición del sujeto colectivo como entidad soberana que el hecho de votar comporta.
Primera trampa, pues: no ser para votar sino votar para ser. Y aquí aparece inmediatamente una segunda trampa. Porque, debido a una sorprendente asimetría, este tipo de procesos parecen abocados a terminar sólo de un modo. El destino de Cataluña una vez alcanzado el carácter de sujeto nacional con derecho a decidir sobre su futuro político acabará por ser, antes o después, la independencia. ¿Por qué? Pues porque si la respuesta es “no”, la cuestión sigue abierta y puede repetirse la consulta indefinidamente; pero si la respuesta es “sí”, el debate se da por cerrado y la decisión se considera irreversible. Esta fijación con la reiteración de las consultas fallidas es un notable rasgo del pensamiento nacionalista. Y un indicio claro de que, en efecto, su amor por la democracia tiene sus límites. En realidad sólo se apoya en ella cuando le da la razón. Ahí está si no Quebec, con un referéndum en el 80, otro en el 95 y un tercero ya anunciado. Y no debemos dudar de que si lo llegan a ganar no vuelven a convocar al pueblo a un nuevo ejercicio de democracia. Esto es lo mismo que sucedería en Cataluña fuere cual fuere el resultado de la hipotética consulta: una vez reconocido el sujeto decisor, el proceso se reiterará las veces necesarias para llegar al resultado querido. El ciudadano catalán debe pensar por ello que vote lo que vote, no hace sino poner su destino en una pendiente en la que cada consulta fallida realimentará los mecanismos nacionalistas del poder social para demandar otra.
La tercera trampa se oculta en la naturaleza misma del tipo de proceso que se propone. Porque el referéndum (o la consulta, o el plebiscito, etcétera) es el puro simplismo. Y en el simplismo solo caben cuestiones simples. Esto se ha dicho tanto que cansa ver una y otra vez cómo se apela a un mecanismo tan elemental para saldar cuestiones complejas y difíciles. Pero la añagaza es precisamente esa, porque al simplificar cuestiones complejas se cuelan de rondón en las consultas mercancías difíciles de vender a cara descubierta. La simplificación es en realidad un encubrimiento. La crisis económica actual se desencadena con el invento financiero de hacer un paquete con créditos hipotecarios de todo género, buenos, malos y peores, y vendérselo al incauto como un título unitario. Pues bien, las preguntas en paquete son como las hipotecas en paquete. El votante catalán debe saber que con el “sí” le van a endosar no pocos activos tóxicos de los que no se le había advertido. Seguramente también con el “no”. Porque ambas posiciones son puras simplificaciones de decisiones complejas que demandan matices, deliberaciones y balances delicados, cosas todas incompatibles con esas decisiones elementales y perentorias. Se sabe ya desde hace mucho que si fueran votadas separadamente las variadas cuestiones agazapadas en la pregunta de un referéndum, los resultados serían muy diferentes.

Y esa simplificación lleva a la cuarta trampa, quizás la más grave y peligrosa. Al centrarse en una opción binaria, “sí” o “no”, el referéndum va a producir unos efectos devastadores en la convivencia de Cataluña. Esto no es una observación alarmista. Se ha estudiado mucho en psicología social. Los posicionamientos excluyentes (“o esto o aquello”) tienden a ignorar las coincidencias, afinidades y simpatías entre los miembros del grupo. Por artificial que sea la posición en que uno se sitúa (o le sitúan), siempre tiende a crear involuntariamente un lazo más intenso con los de la misma posición y a debilitar el lazo con los demás. Los agrupamientos generan así actitudes más agresivas o competitivas entre las distintas posiciones. Y si esa decisión binaria no es trivial sino que versa sobre una cuestión relevante para el grupo, la división social es irremediable. Los mejores teóricos del nacionalismo hablan de “fronteras interiores” para referirse a la percepción que tienen los nacionalistas de aquellos que no cumplen con los rasgos exigidos por el canon del buen patriota. En un referéndum esos rasgos se condensan violentamente: los otros son los que votan no. Esta operación de psicología colectiva, que se vive desde hace meses en Cataluña, genera fragmentación, fragmentación en los círculos cotidianos, en los lugares de trabajo, fragmentación hasta en las familias, es decir, fragmentación en la sociedad y desconfianza entre grupos y personas. Puede incluso llegar a generar una sorda aversión mutua entre ciudadanos. Es decir, puede llegar a trocar la fluida convivencia de Cataluña en un espeso tejido de recelos.
Como marco jurídico para afrontar cuestiones tan graves, el Parlamento de Cataluña ha engendrado una ley de consultas en la que, por zafarse de los límites legales vigentes, no contempla siquiera un censo serio de electores, suprime a los jueces de la administración electoral del proceso, y no establece delitos o faltas ni recursos judiciales contra las posibles irregularidades. Un texto, pues, ayuno de las más elementales garantías formales. Un paraíso para los ardores de la Asamblea Nacional de Cataluña. Cualquiera que sea el final de este irresponsable proceso, somos muchos los que creemos que los ciudadanos catalanes merecen algo más que esta burda ficción de democracia.
Francisco J. Laporta es catedrático de Filosofía del Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid